La gran llegada de Spider-Man al UCM fue uno de los eventos más esperados por los fans, pero a la vez uno de los más traumáticos para Sony Pictures.
Una de las cosas más importantes del avance del Universo Cinematográfico de Marvel han sido las incorporaciones más recientes. La compañía consiguió la compra de los estudios de Fox y, por otra parte, la concesión de algunas licencias con Sony Pictures. Lo anterior permitió que ‘La Casa de las Ideas’ unificara gran parte de su repertorio de personajes en las producciones. Spider-Man fue uno de los que llegó tras muchos años por fuera del esquema.
El buen amigo y vecino era propiedad de Sony, la empresa que ya había hecho cinco películas del mismo. La primera trilogía fue dirigida por Sam Raimi y protagonizada por Tobey Maguire. A su vez, la siguiente fue encabezada por el talento de Andrew Garfield. A pesar de ello, el héroe se encontraba aislado y no hacía parte de algo mayor, todo por cuestiones contractuales de las firmas.
No obstante, el esfuerzo e insistencia de Kevin Feige como CEO de Marvel Studios tuvo sus frutos y el arácnido apareció en Capitán América: Civil War, interpretado por Tom Holland, haciendo al justiciero neoyorquino debutar en el UCM.
Sin embargo, Sony nunca consideró esto como una ventaja. Tanta era la resistencia de la compañía que Amy Pascal, quien dirigió la multinacional por muchos años, comentó cómo fue todo eso para ella. La experiencia fue registrada en el libro titulado The Story of Marvel Studios: The Making of the Marvel Cinematic Universe.
Confesiones
“Al principio, estaba súper resentida”, comentó la empresaria. «Creo que comencé a llorar y lo eché de mi oficina, o le tiré un sándwich, no estoy segura de cuál”.
“Entonces ella comenzó a pensarlo bien«, continúa diciendo el texto. “En la quinta película de [Spider-Man], no les estábamos dando nada nuevo. Y tengo que ser honesta al respecto, estábamos tratando de ser diferentes, incluso fuimos a lugares para ser diferentes que no deberíamos haberlo hecho. Ya no estábamos frescos”, concluyó Pascal.
Declaraciones vía: Screen Rant
