¿Te imaginas una serie sobre El Mago de Oz pero que fuera con un estilo Juego de Tronos? El proyecto llegó a presentarse, pero… ¿Qué ocurrió? Yo te lo cuento.
La historia de El Mago de Oz, basada en la novela infantil de Lyman Frank Baum, ha tenido muchas versiones que han sido más o menos fieles al material original, pero también es una candidata perfecta para recibir nuevos enfoques radicalmente diferentes. En 2013, la idea de reimaginar este clásico en un formato más oscuro y adulto, al estilo de Juego de Tronos, estuvo a punto de hacerse realidad con la serie Red Brick Road (Camino de ladrillos rojos).
Sin embargo, a pesar de las expectativas generadas, esta ambiciosa producción nunca vio la luz del día. ¿Qué pasó con esta prometedora reinterpretación de El Mago de Oz?
La propuesta de Red Brick Road surgió en un contexto en el que Hollywood exploraba intensamente las posibilidades de expandir y reimaginar universos conocidos. El éxito de franquicias cinematográficas y series de televisión basadas en libros, películas y cómics, como Marvel Studios, Juego de Tronos, The Walking Dead y Harry Potter, había demostrado que había un apetito voraz por historias que ofrecieran nuevas perspectivas sobre mundos familiares.
El Concepto de Red Brick Road.
La premisa de la serie Red Brick Road era ambiciosa, ya que era una continuación de la historia de El Mago de Oz, pero con un giro hacia el drama político y la violencia, características básicas de Juego de Tronos. En esta nueva versión, los personajes y elementos clásicos serían transformados para encajar en un mundo más sombrío y complejo.
Por ejemplo, el Hombre de Hojalata sería reimaginado como un robot, y Dorothy, tradicionalmente una joven inocente, se convertiría en una guerrera madura y aguerrida. Incluso se contemplaba la existencia de una Bruja Asesina con una capa roja, sugiriendo un personaje mucho más siniestro.
Para acompañar esta visión, se desarrolló un arte conceptual que mostraba a Dorothy en una luz completamente diferente: armada y lista para la batalla. Esta imagen contrastaba fuertemente con la Dorothy que el público conocía, y encajaba perfectamente con la intención de ofrecer una secuela más oscura y madura.
La expectativa era que Red Brick Road no solo atrajera a los fanáticos de El Mago de Oz, sino también a una audiencia que disfrutara de dramas épicos con altas dosis de intriga y acción.
¿Por qué no llegó a realizarse?
A pesar de la emoción inicial y las interesantes propuestas de reimaginación, Red Brick Road nunca avanzó más allá de la fase de desarrollo. Las razones exactas para el estancamiento del proyecto no son completamente claras, pero existen varios factores comunes que podrían haber influido.
Primero, las comparaciones con Juego de Tronos establecieron una barrera muy alta. Ya que, no solo fue una serie con un enorme presupuesto y producción de alta calidad, sino que también contaba con una narrativa profundamente arraigada en los libros de George R.R. Martin. La presión de igualar o superar este nivel de éxito podría haber sido desalentadora.
Segundo, el riesgo de convencer a los fans tradicionales de El Mago de Oz era significativo. La película original de 1939 y sus numerosas adaptaciones han sido sinónimo de un cuento infantil y mágico. Cambiar radicalmente el tono podría haber sido visto como una traición a la esencia de la historia original. Sobre todo porque está más cerca del género de aventuras que no de la fantasía épica.
Ahora se estrenará una precuela titulada Wicked que llegará a cines entre el 20 y el 25 de diciembre de 2024, según el país en el que te encuentres. ¿Crees que es una buena idea hacer una serie de El Mago de Oz al estilo Juego de Tronos? Déjame tus comentarios en la sección de opinión.
