Continúa la extensa etapa, de diez años de duración, con Mark Gruenwald al frente de los guiones del Capitán América. Panini Comics abrillanta el escudo de las barras y estrellas para que la foto no quede emborronada por ninguna mancha… ¿o sí?
La duda que sorprende
Los años setenta y ochenta en Estados Unidos se vieron invadidos por la lacra de las drogas. El sueño americano se convirtió en una verdadera pesadilla que los comics de Marvel no ignoraron. En primer lugar llegó la que conocemos como “La trilogía de las Drogas”. Los números 96 al 98 de The Amazing Spider-Man, donde se denunció el abuso de sustancias estupefacientes. Años después asistimos a la creación de Capa y Puñal (Cloak & Dagger) por culpa de la experimentación en jóvenes con drogas de diseño. Y han sido cabeceras como Daredevil o Punisher las que han enarbolado la lucha contra el crimen organizado del narcotráfico.
Recién estrenada la década de los noventa la temática fue tratada en las páginas del Capitán América. Una saga de siete partes que iba a colocar al abanderado de la nación entre la espada y la pared. No en vano la obtención de sus poderes llegó a través de una fórmula que bien podría considerarse directamente una droga. Calles Envenenadas pone a Steve Rogers en una difícil tesitura. Víctima y parte de una trama que envuelve a algunos de los habituales de los bajos fondos de Nueva York, contando como invitados estelares con Daredevil, un personaje mucho más habituado a esas batallas contra el tráfico de drogas, así como a ver el efecto que causan entre sus vecinos de La Cocina del Infierno, y la Viuda Negra.
Las temáticas habituales
Desde el inicio de la etapa Gruenwald, la Sociedad Serpiente ha tenido gran protagonismo, tanto que uno de sus miembros estaba viviendo en esos momentos un affaire con el Capi. Pero no solo Iguana aparece, actuando como adlátere del Centinela de la Libertad, sino que el resto de personajes de origen ofídico sigue haciendo de las suyas. Permaneciendo en el relato incluso con la llegada de M.O.D.A.M. versión femenina de M.O.D.O.K, momento en el que se produce el relevo entre dibujantes, muy a nuestro pesar, saliendo un muy cumplidor Ron Lim para dejar paso a un no tan destacado Rick Levins que se quedaría una buena temporada.
En medio de todo eso tenemos una pausa para los Annuals de Daredevil, Punisher y Capi de 1991. Una saga que había sido conocida en España como La táctica Von Strucker pero que ahora ha cambiado su denominación por una traducción más literal del título, El gambito. Contaremos con las historias principales de las tres partes y con el Annual completo del Capi, con sus historias de complemento incluidas, una forma de publicar a la que ya nos tiene acostumbrados Panini, por tratar de repetir el material justo y concentrar en las diferentes colecciones su propio material específico. Sucede en este propio tomo con la historia que complementaba el Captain America Annual # 9, cuya historia principal relacionada con El Factor Términus puede encontrarse en el Marvel Héroes Los Vengadores La línea a cruzar.
La estrategia Superia
Con este arco en el que Gruenwald nos presentó a Superia, supervillana y científica con lazos con Ideas Mecánicas Avanzadas (I.M.A.), formando un ejército de mujeres que pretendían hacerse con el poder mundial mediante el matriarcado que establecerían esterilizando al resto de mujeres del planeta Tierra, poniendo en valor su única capacidad como reproductoras. Argumento arriesgado para la época que ni siquiera habíamos visto publicado en España hasta la llegada de este tomo, que treinta años después esperemos no suponga un cisma enorme.
El tomo concluye con los episodios previos a la denominada Operación Tormenta Galáctica, donde Kree, Shi’ar y demás volvieron a enzarzarse en una guerra. Estos episodios sirvieron para cerrar la trama que desde Calles Envenenadas venía arrastrando Cráneo Rojo, con la presencia de la Madre Superiora o Calavera entre otros. Además este volumen incluye todas las historias de complemento que se fueron publicando en la colección del Capitán América, una iniciativa que había nacido el año anterior durante la publicación del evento estival “La búsqueda de la Gema de Sangre”. Eso permitió a Gruenwald dar más protagonismo a personajes secundarios al tiempo que iba presentando sucesos que después repercutirían en la trama principal.
