El futuro de los videojuegos pasa por la compra de franquicias. Y parece que Microsoft está muy interesado en hacerse con el estudio Valve.
Microsoft ha soltado la bomba y ahora le toca a Valve. La empresa matriz de Xbox ha invertido mucho dinero recientemente en la adquisición de Bethesda y Activision Blizzard. Sin embargo, sus ambiciones no acaban ahí. Muchos jugadores ya conocen el deseo del jefe de Xbox, Phil Spencer, de adquirir el gigante de los videojuegos Nintendo. Sin embargo, el ejecutivo también había hablado acerca de la posibilidad de adquirir el operador de Steam. Un movimiento empresarial que sacudiría enormemente la industria.
En estos momentos, Microsoft se enfrenta actualmente a una batalla legal con los reguladores estadounidenses que intentan bloquear la adquisición de Activision Blizzard por parte de la compañía. Múltiples documentos legales se han filtrado a los medios de comunicación, incluido el que reveló la sugerencia de Phil Spencer de que la empresa podría comprar Nintendo. Sin embargo, la última filtración incluía un correo electrónico de Phil Spencer de 2020 en el que insinuaba que la compañía había estudiado la posibilidad de adquirir Valve.
El control digital de la compañía será casi absoluto
Xbox
Del correo electrónico se desprende claramente que la empresa matriz de Xbox considera que Nintendo es la opción más valiosa. Desafortunadamente, la buena situación financiera de Nintendo hace que tanto una fusión voluntaria como una adquisición hostil sean inviables a corto plazo. Sin embargo, la última línea del correo electrónico también sugiere que Microsoft ha considerado seriamente la adquisición de Valve. «Están totalmente a favor de cualquiera de las dos si surge la oportunidad, al igual que yo», escribió Phil Spencer. Parece que el interés de la compañía por este estudio es muy evidente.
Aunque el escrito no se encuentra entre los documentos filtrados, parece que el interés de Microsoft por Valve iba mucho más allá de una idea pasajera. Otra filtración compartida por el analista Piers Harding-Rolls revela que la compañía estima que el estudio generó unos ingresos de 6.500 millones de dólares en 2021. Por otro lado, estiman que Nintendo gana más del doble, generando 15.100 millones de dólares.
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Eso es solo un poco menos que Apple y la propia Microsoft. Teniendo esto en cuenta, no es de extrañar que Nintendo sea el objetivo preferido, pero que Valve pueda parecer más accesible. Controlar Valve también daría a la compañía un cuasi monopolio en la distribución digital de videojuegos. Sea como sea, no parece que el gigante del software tenga prisa… Al menos, de momento.
