Disney, 20th Century Fox y Paramount se enfrentan a una demanda de la compañía de CGI Rearden que podría afectar a sus ganancias
El uso del CGI y otras tecnologías de captación de imagen están al orden del día. Cada vez son más las productoras que las usan para películas de acción real o de animación. En los últimos años Disney se ha visto en vuelto en una demanda por el uso ilícito de este tipo de tecnología. La empresa de Silicon Valley, Rearden que se especializa en un software de reconocimiento facial demanda a Disney, 20th Century y Fox y Paramount y exige que se comparta parte de las ganancias de sus películas.
La demanda de Readern a esta tres compañías lleva años en marcha. La empresa desarrollo un software de captación de imagen que salto a la fama por ser la usada en el Curioso Caso de Benjamin Button. Después se uso en blockbusters de la talla de Harry Potter y Transformers. El problema surge cuando uno de los ex empleados de Rearden toma parte de esta tecnología MOVA y la transfiere ilegalmente a otras empresas de efectos especiales de Hollywood. Por esto Rearden se ha encaminado en una batalla legal y ha ganado varias demandas contra las empresas que usaron su tecnología, como Digital Domain 3.0 y Shenzhenshi.
El proceso legal también ha salpicado a Disney, Paramount y Fox. Según los rexportes, estos estudios habrían usado la tecnología de Rearden por parte de terceros. La empresa de efectos especiales lleva tiempo queriendo enfrentarse a las productoras y ahora a encontrado un margen legal para poner la demanda en marcha. Se afirma que Rearden puede demostrar que las empresas nombradas se han beneficiado directamente del uso de su propiedad intelectual.
Si está demanda continua los estudios se arriesgan a tener que compartir las ganancias de sus blockbusters con Rearden. La más afectada sería Disney. Los títulos que se incluyen en la demanda son: la Bella y la Bestia, Noche en el Museo 3 y varias películas de Marvel que se remontan a Guardianes de la Galaxia. Rearden discute que la razón por la que estás películas consiguieron tan buena taquilla es por el uso de su tecnología de reconocimiento facil para crear mayor realismo. Además buscan hacerse con parte de los derechos de los personajes creados a través de su tecnología. El más destacable es Thanos.
Por su parte, Disney se ha pronunciado en varias ocasiones. Afirman que Rearden no tiene evidencia suficiente para asegurar que la razón por la que los espectadores han visto sus películas sea gracias a ellos. En una moción de la demanda declarán: «Hay muchas razones por las que los espectadores van al cine a ver una película. Se incluyen junto a otros los actores, el guion, los trajes y la música. Es muy especulativo decir cual de estos factores sea el que haga que las personajes paguen por una película. Pero al menos estos son cosas que la gente ve u oye realmente.»
Lo cierto es que desde el aspecto legal es un caso difícil para Rearden. Pero si la empresa sigue adelante y consigue ganar sería algo notable y pondría en jaque a otros estudios. El caso podría abrir la puerta para empresas similares que quieren presentar demandas similares.