La nueva entrega del sello llega como un mazazo directo a la mandíbula: Absolute Batman ha decidido poner patas arriba el origen del villano más temido de Gotham, y lo hace con una versión del Joker que no solo da mal rollo… sino que podría llevar siglos perfeccionando el arte del terror. Ya sabes, cosas que pasan cuando Scott Snyder decide que hoy quiere que no duermas tranquilo.
Pero espera, porque este número no se limita a contarte un origen. Te lo restriega por la cara, te lo retuerce y te sonríe desde la oscuridad. Y tú ahí, pasando páginas como si no hubiera un mañana.
Un Absolute Batman con un Joker salido de una pesadilla histórica
La premisa arranca fuerte: en este universo, los Wayne no son los dueños del cotarro económico. Quien manda aquí son los Grimm, una familia tan rica que “millonarios” se les queda corto y “billonarios” se les hace poca cosa. Alfred Pennyworth, que siempre tiene un dato inquietante preparado, le cuenta a Bruce Wayne el origen del clan… y ahí empieza el verdadero desmadre.
Según relata Alfred, Joseph “Jack” Grimm era originalmente un crío callejero que hacía de clown para sobrevivir. De ahí pasó al vodevil, y más tarde su hijo saltó a Hollywood. Hasta aquí todo normal dentro del caos habitual del universo de Absolute Batman, ¿no crees? Pero entonces Snyder pisa el acelerador.
Cada nueva generación de Jacks multiplicó la fortuna familiar, extendiéndose en negocios de todo tipo: videojuegos, cadenas de noticias, apuestas online… Todo un imperio. Pero Alfred, que tiene más intuición que Google Trends, está convencido de que el Jack Grimm que vive hoy, el Jack Grimm V, no es su tataranieto. Es el mismo tipo del siglo XIX. Tal cual. Sin cambiar de modelo. Muy bromista para unas cosas, cero bromas para otras.
¿Demonio, biotecnología o algo peor?
Aquí entra en juego la parte más retorcida del cómic. Según Alfred, el multimillonario (perdón, trillonario) lleva más de cien años alimentándose de niños desfavorecidos. Pero no de una forma simbólica o metafórica: hablamos de absorber su energía vital o algo incluso más oscuro. El cómic no se moja todavía, pero deja claro que este Joker no necesita chistes para helarte la sangre.
La pregunta es: ¿estamos ante un demonio? ¿Un mutante? ¿Un bioproyecto científico que salió muy, muy mal? En cualquier caso, el resultado es el mismo: el Joker de Absolute Batman ha fijado su mirada en Gotham City. Y cuando un ser inmortal decide jugar contigo, ya puedes rezar lo que sepas.
El Joker que no ríe… hasta que te come
Una de las revelaciones más salvajes del número es que Jack Grimm jamás ríe. Nada. Ni un gesto. El tío podría ver a Harley Quinn hacer un TikTok raro y se quedaría igual. Pero cuando se transforma en su forma monstruosa para devorar a sus enemigos… ahí sí suelta carcajadas. De las que te despiertan por la noche y no sabes si es tu vecino o el fin del mundo.
Además, Snyder nos muestra un detallito adorable: Jack abandona a cualquiera que le moleste en islas remotas, rollo “supervivencia extrema”, para volver décadas después a cazarlos como si fueran parte de un juego personalísimo. Nada obsesivo, todo sano.
El reflejo oscuro de Bruce Wayne
Y como si todo esto no fuera suficiente, el cómic acaba con un giro que te deja tieso. Jack llega a su mansión. Es elegante, clásica, con un mayordomo y hasta un reloj antiguo que oculta una entrada a la cueva. ¿Te suena? Exacto: la versión retorcida del origen de Bruce Wayne. Un espejo oscuro que convierte al villano en una sombra distorsionada del héroe.
Este guiño funciona de maravilla porque Absolute Batman siempre ha jugado con paralelismos, pero aquí Snyder y Jock lo llevan a otro nivel. Si Bruce es el resultado del trauma convertido en justicia, Jack es el resultado del hambre convertido en eternidad.
DC Comics
DC Comics
DC Comics
Las teorías locas empiezan: The Pale Man vuelve a escena
La gente ya está sacando sus pizarras rojas, porque Bleeding Cool ha lanzado una teoría que podría cambiarlo todo. Según la web, Snyder estaría recuperando elementos de su etapa con Greg Capullo en Batman, concretamente The Pale Man, un asesino inmortal que llevaba apareciendo en la historia de Gotham durante siglos.
Si este Absolute Joker es una evolución de ese concepto, entonces el villano no solo sería parte-monstruo y parte-Bruce Wayne… sino una especie de parásito eterno con raíces en la historia misma de la ciudad. Muy Snyder, la verdad.
Y lo mejor: todo apunta a que esto es solo el aperitivo. Lo que viene puede ser una locura absoluta, porque el equipo creativo sabe perfectamente que el público está listo para un Joker que no solo dé miedo… sino que sea imposible de matar.
Snyder y Jock, la pareja artística que nunca falla
Hablar de Absolute Batman sin mencionar al dúo Scott Snyder y Jock es imposible. La química entre ambos sigue tan afilada como en sus mejores épocas. Jock vuelve a llenar cada página de sombras, trazos tensos y atmósferas cargadas, mientras Snyder prepara giros que te hacen mirar el cómic dos veces, por si acaso.
El número 15 se siente como un renacimiento creativo de la línea Absolute, una demostración de que aún queda mucha gasolina para explorar rincones turbios del universo DC, reinterpretar mitos y, sobre todo, jugar con los límites del Joker sin perder esencia.
Además, Nick Dragotta firma una portada espectacular que funciona como declaración de intenciones: esto no es una historia normal del Príncipe Payaso del Crimen. Es una anomalía peligrosa. Una que parece reírse de ti incluso cuando no ves su sonrisa.
El Absolute Joker promete destrozar Gotham
Con este origen mutado, perverso y casi mítico, el Joker del universo Absolute se convierte en una amenaza que deja pequeño todo lo visto antes. Y si ya conoces a Snyder, sabes que no acostumbra a presentar algo así sin preparar un desastre monumental a continuación.
La pregunta es: ¿Cómo reaccionará Bruce Wayne al saber que el enemigo que persigue puede llevar dos siglos devorando vidas? ¿Qué se supone que haces contra un monstruo inmortal que tiene su propio bat-refugio y que te mira como si fueras un juguete roto?
Sea como sea, Absolute Batman acaba de subir de nivel, y esto pinta a saga gorda. De esas que dentro de unos años recordarás diciendo “yo estuve ahí cuando empezó el caos”.
Y tú, ¿crees que este origen del Joker es la locura definitiva o Snyder todavía tiene cartas guardadas? Te leemos abajo. Y acuérdate de seguirnos en Google News, que ahí no mordemos… de momento.



