Este finde llega por fin a los cines de España The Running Man, el reboot con Glen Powell que en Estados Unidos ha arrancado con menos carrerilla de la que Paramount esperaba… pero con un salseo delicioso alrededor: el guionista de la peli original del 87 ha hablado, y lo ha hecho con una sinceridad que ya quisieran muchos blockbusters.
Steven E. de Souza, el responsable del guion que Arnold Schwarzenegger convirtió en icono, no ha ido de “vieja gloria” ni ha tirado del típico “en mis tiempos esto se hacía mejor”. Nada de eso. El hombre ha confesado que estaba deseando que esta nueva versión funcionara, como si fuera un amigo animando desde la grada. Y lo mejor es que reconoce entre risas que las críticas al final de la película le suenan demasiado… porque en 1987 le dijeron exactamente lo mismo a él.
Un arranque discreto que nadie esperaba
Paramount lanzó The Running Man este fin de semana y el resultado ha sido más tibio de lo previsto: 16,5 millones de dólares en Estados Unidos y 28 millones a nivel global (aunque faltan todavía muchos países en los que aterrizar, a España llega este fin de semana), quedándose en un segundo puesto bastante más frío de lo que cualquier gran producción de ciencia ficción habría deseado. Sobre todo si tenemos en cuenta que detrás está Edgar Wright, un director querido por el público gracias a títulos como Baby Driver o Scott Pilgrim.
The Running Man adapta de nuevo la novela de Stephen King publicada en 1982 bajo el pseudónimo de Richard Bachman, el mismo material que inspiró la versión de Paul Michael Glaser protagonizada por Arnold Schwarzenegger. A ojos de Hollywood, traer de vuelta esta historia parecía una apuesta segura. Pero el público —al menos en este primer fin de semana— parece haber pensado otra cosa.
Aunque quizá la comparación más interesante es la histórica: la película del 87 recaudó 38 millones, que ajustados a hoy serían unos 109 millones. Es decir, tampoco fue un bombazo, pero sí dejó huella. Esta nueva versión, por ahora, no ha conseguido replicar ese impacto… al menos todavía.
El guionista original rompe el silencio: “Estaba deseando que funcionara”

Steven E. de Souza, responsable del guion del clásico protagonizado por Schwarzenegger, no ha tardado en reaccionar. En su conversación con The Hollywood Reporter, el escritor reconoció que había leído el guion de esta nueva versión de The Running man —tiene crédito adicional por material literario— pero que aún no ha tenido ocasión de ver la película terminada.
Sin embargo, algo llamó su atención: las críticas actuales parecen repetir el mismo patrón que hace casi 40 años. Según cuenta, incluso entre las reseñas positivas, muchos coinciden en que el final vuelve a tropezar. El guionista lo resume con una frase que funciona para ambas adaptaciones: “Algo salió mal otra vez entre la página y el escenario.”
La comparación con su propio trabajo no es casual. De Souza recuerda que la novela de King termina de forma tan oscura que las adaptaciones se han visto obligadas a modificar el desenlace para hacerlo más accesible. La del 87 lo hizo por falta de presupuesto; la de 2025, por motivos distintos pero con un resultado parecido.
De Souza lo explica con humor: “Ambas versiones retocan el final del mismo modo. Quizá la tercera, en 2045, consiga aterrizarlo de verdad.”
Marketing, público y una cuestión que vuelve siempre: ¿para quién es esta película?
Otra observación interesante del guionista tiene que ver con el tipo de audiencia al que ha llegado este reboot. The Running man ha atraído principalmente a un público masculino, algo que para él tiene sentido, pero que también puede explicar la debilidad del estreno.
Las películas de ciencia ficción suelen inclinarse hacia ese perfil, pero según de Souza, el marketing pudo haber fallado en presentar elementos capaces de atraer a más segmentos del público, especialmente mujeres. No lo dice como una crítica destructiva, sino como un análisis de la situación: si solo convences a una parte del público, te dejas la otra mitad fuera de la sala.
La crítica también ha sido desigual. El propio THR señala que, aunque no le falta acción ni adrenalina, la película “acaba resultando vacía”. Y la puntuación actual en Rotten Tomatoes lo refleja: un 65% de aprobación por parte de los críticos, señal de que la recepción es tibia, no desastrosa.
Entre nostalgia y sorpresa: el peculiar “efecto boomerang” del estreno
Lo curioso es que de Souza no parece molesto ni incómodo con esta nueva versión. Al contrario. Asegura que disfruta viendo cómo los fans comparan ambas películas, compartiendo escenas favoritas tanto de la original con Schwarzenegger como de esta nueva con Glen Powell. Para él, que más gente descubra o redescubra su guion es un “win-win”.
La frase que deja clara su mentalidad es una que vale oro: “Nunca entenderé a los creativos que se enfadan porque sus obras se reinician. Yo jamás estaría molesto.”
Es un enfoque refrescante dentro de una industria donde los remakes suelen levantar más egos que entusiasmo. Para de Souza, cuantas más adaptaciones existan, más oportunidades hay de que su trabajo siga vivo. Y si esta versión no ha brillado en su primer fin de semana, él no lo vive como una derrota: simplemente como un paso más dentro del extraño viaje que ha tenido The Running Man desde 1987.
¿Y qué pasa ahora con *The Running Man*?
La gran incógnita es si la película conseguirá recuperarse en la segunda semana. Edgar Wright tiene un público fiel, Glen Powell está en uno de sus mejores momentos profesionales, y el género distópico sigue teniendo tirón. Pero en estos tiempos —con estrenos masivos, plataformas, ventanas estrechas y un público más exigente que nunca— un arranque débil puede convertirse en un lastre difícil de levantar.
Aun así, The Running Man tiene a su favor algo que pocas películas poseen: una base de nostalgia muy concreta y un eco de culto que nunca desapareció del todo. Si la película encuentra su público en las próximas semanas, podría convertir su estreno silencioso en un boca-oreja potente. Si no, puede que termine como una rareza dentro de la filmografía de Edgar Wright.
En cualquier caso, está claro que el guionista original seguirá animándola desde la línea de meta. Y, al menos para él, eso ya cuenta como victoria.




