Anoche Londres se convirtió en territorio Yautja. Disney y 20th Century Studios celebraron la premiere mundial de Predator: Badlands, y aunque las críticas completas todavía están bajo embargo, las redes sociales ya rugen con las primeras impresiones. Y ojo, porque parece que la criatura más letal del espacio vuelve con más fuerza que nunca.
Dan Trachtenberg, el responsable de Prey y 10 Cloverfield Lane, ha conseguido lo que muchos pensaban imposible: reinventar una franquicia agotada sin perder su esencia. ¿El resultado? Una locura cósmica, brutal y sorprendentemente emocional.
Predator: Badlands es una “buddy movie cósmica” que nadie esperaba
Las primeras reacciones a Predator: Badlands son casi unánimes: el público se lo ha pasado en grande. Muchos asistentes la describen como una “cosmic buddy road movie”, una mezcla entre aventura espacial, western intergaláctico y drama de aceptación, donde la acción brutal típica de la saga se combina con una historia de amistad improbable.
Uno de los mensajes más compartidos en redes la define así: “Predator: Badlands es la prueba visual de que Dan Trachtenberg es el pionero que necesitaba esta saga. Cada película suya expande los límites del universo Predator”.
Otro crítico destaca su tono diferente: “No es tan sangrienta como las anteriores, pero es la más épica. Tiene corazón, humor y batallas a mano limpia que son una pasada”.
En resumen: Predator: Badlands no es sólo otra película de cazadores y presas. Es una nueva etapa para una franquicia que parecía haber perdido el rumbo.
Tráiler Predator: Badlands
El nuevo depredador y su inesperada aliada
La historia de Predator: Badlands nos lleva al futuro, a un planeta remoto y hostil donde un joven Yautja marginado, interpretado por el debutante Dimitrius Schuster-Koloamatangi, debe enfrentarse a su propio destino. En su viaje se cruza con Thia, una humana interpretada por Elle Fanning, que lo acompaña en una misión que mezcla redención, supervivencia y la búsqueda del enemigo definitivo.
Sí, lo has leído bien: un Predator y una humana trabajando juntos. Y no, no es un fanfic. Trachtenberg juega con la idea del “enemigo común” para explorar nuevas capas del mito Yautja. ¿No te intriga saber cómo encaja eso en la cronología oficial?
Un regreso a lo grande (y en todos los formatos posibles)
Disney y 20th Century Studios no se han quedado cortos. Predator: Badlands llega el 7 de noviembre y se estrenará solo en cines, pero lo hará en todas las versiones premium imaginables: IMAX, Dolby Cinema, RealD 3D, Cinemark XD, 4DX y ScreenX. O sea, si no sientes cómo vibra la butaca, algo estás haciendo mal.
El equipo detrás de esta aventura incluye nombres potentes como John Davis, Marc Toberoff y Ben Rosenblatt, habituales de la saga. Todos ellos han apostado por una expansión del universo Predator mucho más ambiciosa, con mitología Yautja, nuevos escenarios alienígenas y un enfoque más emocional que nunca.
¿Te imaginas un Predator con sentimientos? Pues parece que sí, y sin perder un ápice de brutalidad.
Acción, emoción y humor orgánico
Entre las reacciones más virales, destacan comentarios sobre lo bien equilibrada que está la película. No falta la acción descarnada, pero hay un tono más ligero y hasta divertido. Un espectador lo resume así:
“Una aventura de ciencia ficción que tiene de todo: acción inventiva, comedia orgánica y una historia que te atrapa de principio a fin”.
Predator: Badlands
Sin embargo, no todo es perfecto. Algunos apuntan que ese tono más familiar y luminoso puede no convencer a los que crecieron con las versiones más oscuras y sangrientas. Hay quien dice que Predator: Badlands “toma grandes riesgos que no siempre funcionan”. Pero incluso las críticas más tibias coinciden en que Trachtenberg ha conseguido algo valiente: expandir los límites del universo sin repetir fórmulas.
¿Y los fans de toda la vida?
Aquí viene el punto delicado. Varios comentarios mencionan que los “legacy fans” podrían quedarse algo fríos ante ciertos cambios en la mitología. Se habla de retcons y reinterpretaciones de elementos clásicos, especialmente en la forma en que se retrata la sociedad Yautja.
Pero, sinceramente, después de tantas secuelas y reboots, ¿no era hora de hacer algo distinto? A veces, para mantener viva una saga, hay que arriesgar. Y Predator: Badlands parece el ejemplo perfecto de eso.
El veredicto: el depredador vuelve con hambre
Tras su premiere mundial en Londres, Predator: Badlands se perfila como una de las sorpresas del año. Es la entrega más ambiciosa visualmente, la más emocional narrativamente y, sobre todo, la que más arriesga creativamente.
Dan Trachtenberg consolida su reputación como el director que entendió lo que otros olvidaron: que el universo Predator no solo va de cazar… sino de evolucionar. Y lo hace con un estilo visual espectacular, combates cuerpo a cuerpo dignos de aplauso y una química inesperada entre sus protagonistas.
Así que ya sabes: el 7 de noviembre marca el regreso del cazador más temido del cine, y promete dejarnos sin aliento. Y tú, ¿te atreverás a entrar en las Badlands?




