No todos los días un actor que ha sido Superman vuelve a hablar del personaje con lágrimas en los ojos. Pero eso es justo lo que ha ocurrido, y sus palabras han sorprendido hasta a los más veteranos del universo DC. ¿Qué ha sentido realmente al ver a su sucesor con la capa?
Brandon Routh, quien se metió en la piel del Hombre de Acero en Superman Returns (2006), ha visto ya la nueva película de James Gunn y su reacción ha sido todo menos indiferente. Lo que dijo en una reciente entrevista ha llamado la atención por su sinceridad, su emoción y por el mensaje oculto que lanza sobre el futuro del personaje.
El regreso emocional de un Superman olvidado
Aunque su película fue recibida con tibieza en su momento, la interpretación de Routh como Clark Kent fue uno de los aspectos más valorados. Su versión del superhéroe era contenida, vulnerable, y quizás demasiado atada a la nostalgia de Christopher Reeve, pero había algo auténtico en ella.
Durante años, muchos pensaron que nunca volvería al papel, pero Routh tuvo una segunda oportunidad como el Superman de Kingdom Come en el crossover televisivo Crisis en Tierras Infinitas de CW. Fue un breve homenaje, pero dejó claro que su vínculo con el personaje seguía intacto.
Ahora, casi dos décadas después de su debut en el universo DC, el actor se ha sentado en una sala de cine para ver cómo otro toma el relevo.
«Lloré tres veces»: las palabras que nadie esperaba
En una entrevista con Variety, Brandon Routh confesó haber visto la nueva película Superman de 2025, dirigida por James Gunn y protagonizada por David Corenswet. Y su reacción no puede ser más clara:
«Fue muy divertida. La disfruté muchísimo. David está fantástico. Lloré al menos tres veces».
Pero no se quedó ahí. Routh explicó que su mirada sobre Superman ha cambiado con los años, y que hay momentos en la película que lo tocaron profundamente. Mencionó específicamente la escena en la que Lois y Clark conversan en su apartamento y, sobre todo, los elementos familiares que atraviesan toda la historia.
«Lo viví desde otro lugar, con otra perspectiva. Es una película grande. Pasa de todo. Tengo que volver a verla».
Una declaración así, viniendo de alguien que ha llevado el traje con orgullo, dice mucho. No se trata solo de aprobación profesional: es empatía, identificación, respeto por lo que viene y, quizá, un poco de nostalgia por lo que fue.
Superman Returns (2006)
El nuevo Superman y la bendición del anterior
David Corenswet, conocido por series como Hollywood, ha asumido el enorme reto de convertirse en el nuevo Clark Kent del universo cinematográfico de DC. Y lo ha hecho con el respaldo directo de James Gunn, que no solo dirige, sino que también ha marcado la visión narrativa de esta nueva etapa.
Acompañado por Rachel Brosnahan como Lois Lane, Nicholas Hoult como un Lex Luthor reformulado, y personajes como Hawkgirl, Mr. Terrific o Metamorpho, el nuevo Superman no llega solo. Forma parte de una visión más amplia, conectada al ambicioso DCU que Gunn ha comenzado a construir.
Y que Brandon Routh, alguien que conoce bien el peso del personaje, se emocione viéndolo, es un respaldo que muchos no esperaban, pero que dice mucho sobre el trabajo que hay detrás.
¿Qué viene ahora para Superman?
En palabras del propio Routh: «Estoy muy emocionado por el potencial que tiene el Universo DC. Un lanzamiento exitoso como este es bueno para todos los que quieren más de lo que DC puede ofrecer. Hay muchas historias increíbles por explorar».
No es solo una opinión amable. Es un mensaje de confianza en que esta vez, DC puede hacer las cosas bien. Que el nuevo comienzo tiene cimientos sólidos. Que Superman no solo ha vuelto, sino que podría volver a ser el faro que guíe al resto de héroes.
Superman (2025)
Y lo más interesante es que sugiere que él, desde fuera, seguirá atento. Que no ha soltado del todo la capa, aunque ahora la lleve otro.
El legado de la bondad
James Gunn, en el mensaje que publicó al terminar el rodaje, dejó claro que su versión de Superman no gira en torno al poder, ni a las batallas cósmicas, ni a la destrucción. Gira en torno a la bondad.
«Quería hacer una película sobre un buen hombre en un mundo que no siempre lo es. Y lo que viví con el equipo me inspiró cada día».
Eso es lo que parece haber tocado a Brandon Routh. No las explosiones, no los guiños al cómic, no las conexiones con otros personajes. Lo que lo emocionó fueron los momentos en los que Superman demuestra que sigue siendo, ante todo, un símbolo de esperanza.
Un hombre que cree en las personas. Y eso, en tiempos como estos, sigue siendo el superpoder más necesario de todos.
