No fue culpa suya. Ni del personaje. Ni siquiera del guion, que por una vez se atrevió a adaptar un cómic de Hellboy como debía. Jack Kesy lo dio todo como el mítico demonio rojo con la mano de piedra en The Crooked Man. Pero entonces llegó el caos. La película desapareció casi sin dejar rastro y su estreno fue, según palabras del actor, una locura empresarial difícil de explicar.
Ahora que presenta su nueva cinta de acción, Bang, el actor ha querido hablar por primera vez del que debía ser su gran salto al cine de superhéroes. Y lo hace con franqueza, con cariño y también con rabia. Porque para él, Hellboy fue algo muy especial. Pero alguien no supo cuidar ese trabajo. Y todo se fue al infierno… literalmente.
«Hellboy fue una gran experiencia… pero la cagaron»
En plena promoción de Bang, su nueva película donde interpreta a un asesino a sueldo que se replantea su vida tras una experiencia cercana a la muerte, Jack Kesy fue directo al grano cuando le preguntaron por Hellboy: The Crooked Man:
«Fue una experiencia brutal. Llegó de la nada. Fue como si un cohete de Superman aterrizara frente a mí. Pensé: ¿Qué demonios? Vamos a hacerlo. Pasé unas pruebas, conseguí el papel y me encantó el personaje. Es como un alter ego que duerme en mi armario. Es un personaje increíble».
Aquel entusiasmo se transformó en frustración cuando vio cómo se gestionaba su estreno. La película apenas tuvo distribución, apareció sin aviso en plataformas digitales y recaudó solo 2 millones de dólares a nivel mundial. Para un reboot de una franquicia con tanto potencial, fue un desastre sin paliativos.
«Es una pena cómo se gestionó, mal gestionó… Pero eso es negocio, tío. Que les den. Ese no es mi problema. Fue una pena porque creo que, si hubieran dado un poco más de espacio y recursos, podríamos haber hecho algo especial. Pero todo bien, tío. Estas cosas pasan».
Hellboy: The Crooked Man
El infierno detrás del infierno
La película fue producida por Ketchup Entertainment y dirigida por Brian Taylor, con un enfoque mucho más fiel al cómic de Mike Mignola. Pero la decisión de lanzarla sin apenas promoción y de forma desordenada, provocó que pasara desapercibida incluso entre el público que esperaba un nuevo Hellboy.
En Estados Unidos ni siquiera llegó a los cines. En otros países, se estrenó de forma limitada. Y la consecuencia fue inmediata: la película murió antes de tener una oportunidad real.
Lo que más duele a Jack Kesy no es el fracaso comercial, sino que la historia y el personaje merecían algo mejor. Y aunque ahora triunfa con Bang, donde comparte pantalla con Peter Weller, aún guarda cierto afecto por ese demonio de piel roja.
¿Volvería como Hellboy?
La gran pregunta no tardó en llegar: ¿le gustaría volver a interpretar a Hellboy si surgiera una nueva oportunidad?
«Absolutamente. ¿Sabes por qué? Porque al principio nunca había hecho nada parecido. Había trabajado con prótesis, pero cosas de un día, dos… no algo diario. Fue un reto, pero ahora ya sé cómo llevarlo. Sé lo que se siente, sé lo que tengo que hacer».
«No hay expectativas confusas. Sé cómo hacerlo. Cambiaríamos algunas cosas, pero sabría cómo manejarlo mucho mejor. Sí, sin duda contestaría esa llamada ahora mismo… y lo reventaría, eso es lo que haría».
Con esa seguridad, queda claro que para Kesy Hellboy no es un capítulo cerrado. Es una cuenta pendiente.
Hellboy. El Hombre Retorcido
¿De qué iba Hellboy: The Crooked Man?
La película se ambienta en 1959, cuando Hellboy y la agente Bobbie Jo Song deben transportar una araña sobrenatural en tren. Pero al cruzar los Montes Apalaches, la criatura se transforma en un monstruo gigantesco y escapa. Algo maligno habita en esas tierras, y Hellboy lo siente.
Allí conocen a Tom Ferrell, un hombre marcado por su pasado con brujas y demonios. Juntos se enfrentan a Effie Kolb, una bruja que manipuló a Tom para invocar al Crooked Man, una figura demoníaca que otorga suerte a cambio de almas. A medida que avanzan, se sumergen en un mundo lleno de maldiciones, pactos oscuros y visiones del pasado.
Hellboy lucha contra un ejército de criaturas infernales, mientras Tom intenta redimirse. Con la ayuda de un hueso mágico, una iglesia embrujada y el sacrificio de varios personajes, logran derrotar al Crooked Man. Pero el precio es alto. La película, con un tono más oscuro y rural, apostaba por una atmósfera gótica y fiel a las viñetas.
El reboot más fiel… y más ignorado
A diferencia de las versiones anteriores de Hellboy con Ron Perlman o David Harbour, The Crooked Man buscó capturar el estilo del cómic original: demonios bíblicos, folklore rural americano y una narrativa más lenta, más macabra. Y lo logró.
Por eso mismo, el hecho de que la película no recibiera una campaña de promoción decente ha sido visto como una oportunidad desperdiciada. Muchos críticos incluso destacaron la actuación de Kesy como uno de los grandes aciertos del film.
¿Merece una segunda oportunidad?
Las palabras de Jack Kesy parecen abrir la puerta. Aunque todo el equipo se volcó en hacer una película distinta, su fracaso no vino de dentro… sino de fuera.
«Si hubieran dado un poco más de pista de aterrizaje y recursos, habría salido algo especial», insistió el actor. «Pero así es esto. A veces, simplemente pasa».
Y tal vez tenga razón. En una industria donde el marketing lo es todo, incluso un buen Hellboy puede caer en el olvido si nadie lo ve.
Bang: la nueva vida de Jack Kesy
En Bang, su nueva película, Kesy interpreta a uno de los asesinos a sueldo más temidos. Tras una experiencia cercana a la muerte, empieza a replantearse su camino, pero su jefe del crimen organizado, interpretado por Peter Weller, no está dispuesto a dejarlo ir tan fácilmente.
La cinta ya está disponible en cines seleccionados y en plataformas digitales. Y, según la crítica, podría convertirse en una joya del cine de acción independiente. Un nuevo comienzo para un actor que, pese a todo, sigue dispuesto a desatar el infierno si hace falta.




