Samantha Morton habla sobre su mala experiencia con Harwey Weinstein
Harvey Weinstein es uno de los responsables de cambiar parte del panorama cinematográfico de Estados Unidos en la décadas de 1980 y 1990 con su compañía Miramax. Él y su hermano fueron los responsables del lanzamiento de películas como Pulp Fiction, Shakespeare in Love, la saga Scream y la paródica Scary Movie (ambas bajo el sello Dimension Films). Por desgracia también llevaron a cabo varias prácticas poco éticas y un gran abuso de poder, incluyendo abuso sexual, del que han hablado muchas actrices y por el que hoy Harvey Weinstein cumple pena en prisión.
La intérprete Samantha Morton ha recordado en de The Louis Theroux Podcast que en su momento Harwey Weinstein quedó impresionado por su papel en A flor de piel de 1997 y le ofreció trabajar en Adam y ellas (estrenada en el 2000). Ella leyó el guion y lo rechazó, “Dije: ‘No me gusta. Creo que la película es realmente misógina y no quiero ser parte de ella.’ El director de casting me respondió: ‘No le dices que no a Harvey’. Bueno, no es para él. Simplemente no quiero hacer esta película… y acababa de trabajar con Stuart Townsend en A flor de piel. Simplemente no era interesante para mí. Fui super educada”. Algo que, según ella relata, le costó trabajar en El secreto de los hermanos Grimm con Matt Damon y Heath Ledger. En su lugar estuvo Lena Headey, actriz también de talento a la que se ha visto en Dredd y en Supercañeras: El internado puede ser una fiesta (adaptación de las tiras de prensa St. Trinian’s).
Harvey Weinstein durante uno de sus juicios
Los que Weinstein tiene que decir
El ex productor hoy preso en unas declaraciones a través de un representante dio una visión distinta de lo sucedido a Variety. Según él considera que ella “es una actriz brillante y puede hacer cualquier cosa bien”, pero que “elegimos a Lena Headey para El secreto de los hermanos Grimm simplemente porque creíamos que era la mejor para ese papel”. Y apostilló que “La gente debería dejar de usar mi nombre para avanzar en sus propias agendas en este momento; es demasiado fácil decirlo y volverse viral”.
En 2017 empezaron las noticias sobre Harwey Weinstein y el acoso sexual a varias actrices. Entre los diferentes nombres están el de Ashley Judd y Rose McGowan, pero solo son las dos más visibles de más de 80 mujeres que hablaron sobre su abuso de poder para aprovecharse de ellas. En 2020 fue condenado a prisión por estos actos a 23 años, pero su sentencia se amplió cuando en 2022 fue de nuevo encontrado culpable por otros cargos y de nuevo en 2023, en todos los juicios por delitos sexuales entre los que se incluyen varias violaciones.
