Lo que acaba de contar Shawn Levy sobre su película de Star Wars es un aviso claro de que Lucasfilm está abriendo una puerta que muchos creían cerrada desde hace años. Y no es una puerta hacia el pasado, sino hacia algo completamente nuevo… ¿No te parece interesante?
Porque lo sorprendente aquí no es solo que Shawn Levy esté dirigiendo una película galáctica, sino que lo esté haciendo con un nivel de libertad creativa que prácticamente nadie ha tenido dentro del universo Star Wars desde hace mucho tiempo. Y lo curioso es cómo lo explicó él mismo, casi como quien descubre un regalo inesperado.
Recuerda seguirnos en Google News, que estas historias nos quedan cada vez más épicas.
Shawn Levy lleva tiempo trabajando en Star Wars: Starfighter, una película ambientada unos cinco años después de El ascenso de Skywalker, pero con algo que la diferencia de inmediato: su apuesta radical por personajes completamente nuevos. Nada de cameos, nada de rescates del pasado, nada de reflotar héroes conocidos. Y esto no es una interpretación libre del director, sino una directriz que llega desde lo más alto de Lucasfilm.
Shawn Levy confirma lo que muchos sospechaban
En una conversación muy reveladora, Shawn Levy contó que, en las primeras reuniones, se sentó frente a Kathleen Kennedy con una idea muy lógica: “¿Y si meto aquí a algún personaje conocido? Algo que conecte al público con lo que ya existe”. Pero la respuesta lo dejó, literalmente, descolocado.
Estas fueron las declaraciones completas que dio en el podcast de The Playlist: «Cada vez que he preguntado: ¿Debería usar a este personaje que quizá estuvo en aquella película? Siempre me han respondido: La gente ya ha visto eso. Haz algo nuevo».
«No hay mandatos ni interferencias, más allá del constante ánimo de: Haz que esto sea nuevo. Y esa es la verdad».
«A diferencia de Han Solo… a diferencia de El ascenso de Skywalker, que era una secuela de otras dos películas y, al final, la novena entrega de la saga Skywalker, Starfighter está protagonizada por personajes completamente nuevos basados en ideas que Jonathan y yo cocinamos solos y juntos».
Shawn Levy (cordonpress)
En los últimos años Lucasfilm ha estado navegando entre nostalgia, rescates de personajes míticos y continuaciones de historias ya muy exploradas. Que Shawn Levy reciba el mensaje contrario: “haz lo que quieras, pero que sea nuevo”, marca un cambio de rumbo evidente.
El origen de todo: la llamada más inesperada
El propio Shawn Levy también habló sobre el primer contacto que tuvo con Kathleen Kennedy. Y aquí es donde se nota que la conversación no iba por donde él creía. En español, esto fue lo que contó:
«Kathleen Kennedy me dijo: Quiero que hagas una película de Star Wars. Y yo pregunté: ‘¿Pero es precuela de qué? ¿Es secuela de qué? ¿Cuál es exactamente?’. La respuesta fue: Es lo que tú quieras que sea. Tú eliges al guionista, tú eliges la historia, solo impregna la película con la sensación que tienen tus obras».
Ese “haz lo que quieras” es casi ciencia ficción dentro de una franquicia tan controlada. Pero lo más interesante es que encaja perfectamente con lo que busca Lucasfilm ahora: salir del bucle de “más de lo mismo”. Y si lo piensas fríamente, darle a Shawn Levy un lienzo en blanco tiene sentido. El director de Deadpool & Wolverine y The Adam Project sabe combinar aventura, humor y corazón como muy pocos. Y quizá ese era justo el cóctel que Star Wars necesitaba para respirar aire fresco.
Un reparto muy potente para una historia completamente nueva
Si ya es sorprendente que Shawn Levy tenga total libertad creativa, más lo es ver el reparto que encabeza Starfighter. La película reúne a actores como Ryan Gosling, Flynn Gray, Matt Smith, Mia Goth, Aaron Pierre, Simon Bird, Jamael Westman, Daniel Ings y Amy Adams. Una mezcla curiosa, potente y variada que encaja perfectamente en la idea de construir algo desde cero.
Star Wars: Starfighter
El guion lo firma Jonathan Tropper, conocido por series como Banshee y Warrior, lo cual ya deja claro el tono: acción, intensidad y un toque emocional que suele funcionar muy bien en pantalla. El rodaje comenzó el 28 de agosto de 2025 y, de momento, la fecha de estreno se mantiene en el 28 de mayo de 2027, una ventana donde Disney suele colocar proyectos grandes.
Shawn Levy describió la historia como una aventura de persecución, casi una road movie galáctica. Ryan Gosling interpreta a un expiloto de Ala-X que debe proteger a su sobrino, un niño sensible a la Fuerza que se convierte en objetivo de usuarios del lado oscuro y restos de la Primera Orden. Y claro, la misión es llevar al pequeño hasta la nueva Academia Jedi que lidera Rey. Todo esto mientras fuerzas muy poderosas y desconocidas, los persiguen sin descanso.
Es fácil imaginar la película visualmente: naves retrofuturistas, planetas que aún no hemos visto, villanos que no dependen de apellidos emblemáticos y héroes sin pasado predefinido. Y ahí es donde la libertad creativa de Shawn Levy puede marcar la diferencia, porque no está obligado a encajar su historia dentro de una cronología rígida ni a sustituir piezas de la saga clásica.
¿La libertad creativa de Shawn Levy puede cambiar Star Wars?
Es la gran pregunta, ¿verdad? Porque después de la última trilogía, que dejó sensaciones bastante irregulares, muchos daban por hecho que Lucasfilm volvería a jugar sobre seguro. Rescatar personajes, hacer secuelas, estirar lo que ya funcionaba. Pero parece que la nueva etapa va justo en la dirección contraria. Y Shawn Levy es, tal vez, el mejor ejemplo de esa apuesta.
Levy no es un director que haga cine “correcto”. Es alguien que entiende muy bien cómo equilibrar emociones, ritmo y humor sin perder solidez. Cuando dice que tiene libertad absoluta, suena a declaración creativa más que a frase publicitaria. Y si de verdad Lucasfilm está confiando en su visión de manera tan abierta, podríamos estar ante una de las películas más distintas de Star Wars en años.
Y oye, igual es justo lo que hace falta para que la galaxia se sienta grande de nuevo, ¿no crees?
Al final, lo que deja claro toda esta historia es que Shawn Levy está haciendo la película que él quiere hacer. Sin ataduras, sin depender de cameos, sin cadenas. Solo una idea nueva que quiere contar a su manera. Y, sinceramente, eso suena muchísimo más emocionante que cualquier intento de repetir fórmulas ya agotadas.
Habrá que esperar a 2027 para verlo, pero algo me dice que esta nueva aventura podría dar más sorpresas de las que imaginamos. Y si Shawn Levy está tan libre como dice… igual hasta nos devuelven esa sensación de descubrir algo por primera vez. ¿Qué opinas?
