Salvar el mundo ya no va solo de capas, rayos y frases épicas. En 2025, la serie de ciencia ficción que quiere tenerte pegado al sofá mezcla espionaje, paranoia tecnológica y dilemas morales de los que te hacen pensar incluso cuando ya han salido los créditos. Y sí, el protagonista te va a sonar mucho.
Alexander Hale no es un superhéroe… o al menos no todavía. Es analista de inteligencia, traje discreto, café frío y secretos de Estado. El problema empieza cuando descubre que su propio cuerpo es el punto débil de todo el sistema. Así arranca The Copenhagen Test, una serie de ciencia ficción con aroma a thriller político y ritmo de blockbuster moderno.
Serie de ciencia ficción con espías, nanobots y el enemigo en tu cabeza
En The Copenhagen Test, Simu Liu interpreta a Alexander Hale, un analista brillante que asciende dentro de una agencia ultrasecreta del gobierno. Todo va bien hasta que descubre que le han implantado nanotecnología capaz de transmitir todo lo que ve y oye. Sí, todo. Cada palabra, cada gesto, cada error.
A partir de ahí, esta serie de ciencia ficción juega con una idea inquietante: ¿Cómo haces tu trabajo cuando sabes que alguien te está mirando desde dentro? Alexander pasa del despacho al terreno, obligado a participar en misiones peligrosas mientras intenta descubrir quién lo ha convertido en un arma con patas. Y lo peor es que cualquiera puede ser el culpable.
Cuando nadie es de fiar (ni siquiera tú)
Compañeros de trabajo, superiores, viejos amigos… incluso su exnovia entra en la lista de sospechosos. Pero hay un personaje que destaca desde el primer momento: Michelle, una camarera aparentemente normal que sabe escuchar demasiado bien. La interpreta Melissa Barrera, y no tarda en dejar claro que su personaje tiene muchas más capas de lo que parece.
La serie de ciencia ficción no se conforma con persecuciones y gadgets. Aquí hay tensión constante, silencios incómodos y miradas que dicen más que los diálogos. ¿No te da mal rollo pensar que el mayor enemigo puede estar sentado justo a tu lado?
The Copenhagen Test
Una decisión imposible que lo cambia todo
Desde su escena inicial, la serie deja claro que no va solo de acción. Un flashback plantea una elección brutal: obedecer órdenes y salvar a un adulto estadounidense o desobedecer para ayudar a un niño indefenso. No es un simple dilema moral, es una bomba emocional que define al protagonista desde el minuto uno.
Esa pregunta atraviesa toda la serie de ciencia ficción como un hilo invisible. ¿Qué significa ser patriota? ¿Seguir órdenes sin cuestionarlas o atreverse a decir “esto está mal”? Alexander no es un héroe perfecto, y ahí está la gracia. Se equivoca, duda y paga las consecuencias.
Lealtad, patriotismo y líneas borrosas
El propio Simu Liu ha explicado que lo que más le atrajo del proyecto fue precisamente esa ambigüedad moral. La serie no te da respuestas fáciles ni discursos prefabricados. Te lanza la pregunta y te deja con ella, como cuando sales del cine y sigues dándole vueltas camino a casa.
Esta serie de ciencia ficción conecta con el mundo actual más de lo que parece. Tecnología que se mete en tu vida, vigilancia constante y decisiones que se justifican en nombre de algo “más grande”. ¿No te suena demasiado cercano?
Acción física, golpes reales y sudor de verdad
Si esperas peleas limpias y coreografiadas al milímetro, te vas a llevar una sorpresa. Uno de los momentos más comentados de la temporada es una brutal pelea en una librería que demuestra hasta dónde llega el compromiso físico de Melissa Barrera con el personaje.
La actriz se preparó a fondo para estar al nivel de Simu Liu, que ya venía curtido en escenas de acción. Aquí no hay trampas ni dobles escondidos. Se nota en la cara, en el cansancio y en esa sensación de peligro real que transmite la escena. Esta serie de ciencia ficción apuesta por la acción tangible, la que duele.
Cuando romper un decorado no estaba en el plan
Durante el rodaje, cuentan que acabaron destrozando una estantería que no tenía repuesto. ¿Problema? Ninguno. Ese caos controlado es justo lo que hace que la escena funcione. La intensidad se contagia y traspasa la pantalla, algo que no siempre se consigue en televisión.
Ese espíritu se mantiene durante toda la temporada. No hay peleas porque sí. Cada golpe tiene un peso narrativo y emocional. Y cuando termina, te quedas pensando: “Vale, necesito otro episodio ya”.
De espía vigilado a vengador legendario
Mientras lidera esta serie de ciencia ficción, Simu Liu ya tiene la vista puesta en el futuro del cine. En 2026 volverá a enfundarse el traje de Shang-Chi en Vengadores: Doomsday, enfrentándose nada menos que a Doctor Doom.
Simu Liu volverá como Shang-Chi en Avengers: Doomsday
El actor ha confesado su ilusión por compartir pantalla con auténticas leyendas como Ian McKellen y Patrick Stewart. Dos nombres que, solo con decirlos, ya imponen respeto. Pero antes de todo eso, toca disfrutarlo en un registro mucho más contenido y paranoico.
Una serie que llega en el momento justo
The Copenhagen Test se estrena en Peacock el 27 de diciembre y apunta a convertirse en una de esas series de ciencia ficción que se comentan episodio a episodio. No por giros locos sin sentido, sino porque sabe cuándo acelerar y cuándo dejarte pensando en silencio.
Es espionaje, es ciencia ficción y es drama humano. Todo mezclado con pulso firme y sin subrayar demasiado. Justo lo que apetece cuando buscas algo más que ruido de fondo.
Y ahora te toca a ti: ¿te convence esta serie de ciencia ficción con espías, dilemas morales y tecnología inquietante? Cuéntanos qué te ha parecido y no olvides seguirnos en Google News para no perderte ninguna de las próximas obsesiones seriéfilas.
