Hay series que nacen con un aura especial. Y luego está Pluribus de Apple TV +, el nuevo proyecto de Vince Gilligan que, desde su estreno, parecía intocable por la crítica especializada. Durante dos semanas completas mantuvo un 100% perfecto en Rotten Tomatoes, como si nada pudiera rozar su impecable reputación. Pero ya no. Una primera crítica negativa ha roto la racha… aunque con un matiz que te va a sorprender.
Porque perder la perfección no es lo mismo que perder el prestigio. ¿No crees? Pero antes de seguir, déjanos un comentario: ¿Mantener el 99% en Rotten Tomatoes te parece una caída… o una confirmación de calidad?
El fenómeno Pluribus: la nueva joya del creador de Breaking Bad
Desde que Apple TV+ lanzó Pluribus el pasado 7 de noviembre, la conversación ha girado siempre en torno al mismo punto: “Gilligan lo ha vuelto a hacer”. Y no era para menos. Con episodios estrenándose cada semana hasta el 26 de diciembre, la serie ha crecido en boca a boca como esos estrenos que necesitan ser comentados al instante.
La historia sigue a Carol, interpretada por una brillante Rhea Seehorn, una de las pocas humanas que no ha sido afectada por un extraño virus llegado del espacio. El resto de la población vive ahora en una especie de conciencia compartida. Son amables, profundamente felices… incluso inquietantemente dispuestos a satisfacer cualquier deseo que pueda tener Carol. Y eso es justo lo que desata la tensión: ¿qué significa resistirse cuando el mundo entero sonríe?
Esa mezcla de ciencia ficción, humanidad y peligro silencioso es lo que hizo que durante dos semanas completas Pluribus mantuviera algo que muy pocas series logran: un 100% perfecto en Rotten Tomatoes. Ni una sola crítica negativa. Un comienzo de ensueño para cualquier creador. Pero toda burbuja, antes o después, encuentra su primera grieta.
La crítica que bajó la nota: una opinión aislada… pero contundente
El primer “no” ha llegado de la mano de Hannah Brown, periodista de The Jerusalem Post. Su crítica, que califica la serie como “no digna de verse”, ha bastado para que el 100% perfecto bajara a un 99%, una caída simbólica que en realidad cambia más bien poco… aunque sí abre un debate.
Brown argumenta que el prestigio inicial se debe —al menos en parte— al nombre de Gilligan, quien ha dejado una sombra enorme tras Breaking Bad y Better Call Saul. También señala que la premisa es más potente en papel que en pantalla y que el ritmo de la serie es “extraordinariamente lento”.
Su frase más punzante llega casi como un ultimátum: “Si entiendes el mensaje de la serie desde el principio, quizá quieras saltártela.”
Una opinión dura, sí. Pero también una excepción. Porque el resto de la crítica especializada continúa defendiendo que Pluribus tiene más capas de las que se ven a primera vista.
Un mensaje complejo bajo una aparente calma
Pluribus serie de ciencia ficción
Lo fascinante de Pluribus es la forma en la que oculta su intensidad bajo una superficie tranquila. La serie habla de autonomía, duelo, identidad, límites morales, y lo hace sin gritar, sin subrayar de más. De hecho, uno de sus momentos más inquietantes —sin entrar en spoilers— muestra hasta qué punto esta “nueva humanidad” haría cualquier cosa por mantener a Carol feliz… incluso algo impensable.
Aquí es donde las críticas más positivas insisten: la serie no es lenta porque no tenga nada que decir, sino porque invita a escuchar.
La perfección rota… y el mito que sigue intacto
Perder un 1% puede parecer un drama en redes, pero en el mundo real, especialmente en Rotten Tomatoes, es casi un ritual. Toda serie que empieza demasiado arriba acaba encontrando su primer detractor tarde o temprano. Incluso Breaking Bad, considerada una de las mejores series de la historia, se mueve en un 96%.
La realidad es clara: Pluribus no ha perdido calidad. No ha perdido ambición. No ha perdido interés. Solo ha perdido un número redondo.
El 99% sigue confirmando lo que ya sabíamos: esta serie es uno de los proyectos más sólidos del año y uno de los estrenos más particulares del catálogo de Apple TV+.
El debate, eso sí, está servido: ¿es realmente lenta? ¿Su mensaje se percibe demasiado pronto? ¿O estamos ante ese tipo de ficción que incomoda precisamente porque pone un espejo donde no queremos mirar?
¿Qué nos espera ahora?
Con episodios todavía por estrenar hasta el 26 de diciembre, queda mucho margen para que la serie crezca, sorprenda, divida o incluso mejore su reputación. Gilligan no acostumbra a mostrar todas sus cartas al inicio; Better Call Saul es la prueba perfecta de cómo un creador puede construir tensión sin necesidad de explosiones en cada capítulo.
Si Pluribus sigue por este camino, es posible que su final se convierta en una de esas conversaciones de final de año que todos queremos comentar. No por polémica, sino por significado.
Porque, al final, la pregunta central de la serie no es “¿qué pasará?”, sino algo más incómodo: ¿Qué perderíamos si dejáramos de ser exactamente quienes somos? Y eso… es mucho más inquietante que cualquier virus.
¿Y tú? ¿Crees que el 99% hace más daño o más ruido que realidad? Si no quieres perderte nada sobre Pluribus, síguenos ya en Google News.




