Mark Millar vuelve sobre su creación más alocada con una aventura que parte de los hechos de Big Game para devolvernos al supervillano más cafre de todos. Panini Comics abre su agenda de contactos para buscar un nuevo compañero de asesinatos para Nemesis.
Nemesis ¿Quién soy?
Con lo siguiente que voy a decir me estoy jugando mi propio cuello porque llamar Matthew Anderson a Nemesis puede ser mi mayor error. Pero el asesino más despiadado de los que pueblan el Universo creado por Mark Millar, antes conocido como Millarworld, ha dejado atrás muchas cosas, incluida su propia identidad real, para abrazar convertirse en ese villano sin escrúpulos que no suele mirar atrás.
Con este personaje, Millar nunca pierde la perspectiva, solo le importa él mismo, seguir adelante y completar los planes que su siniestra mente va dibujando en rojo carmesí. Un paso detrás de otro, dedicando el tiempo necesario, marcando distintas fases, pero un objetivo claro.
Esto hace que nunca perdamos la perspectiva, que no nos decepcione con cualquier paso en falso que nos haga desencantarnos de este malnacido. Es fiel a su concepción desde el principio y esperamos que nunca llegue a cambiar, que antes le alcance la muerte si es necesario. Porque Nemesis tiene claro quién es, no se debate en pamplinas morales. Es un auténtico hijo de su madre que ha sobrevivido a todo lo que le han echado encima, cosa que no pueden decir los que se han cruzado en su camino. La cuenta de cadáveres la perdimos hace tiempo, él ni siquiera se molestó en empezar a contar. Incluso en su momento más bajo, el que vive al inicio de este volumen, es consciente de lo peligroso que es y de los recursos con los que cuenta, propios o ajenos.

La venganza de la venganza
Porque si hay un tema sobre la mesa a lo largo de estas páginas es la de conseguir satisfacer ese sentimiento de revancha, de resarcir y ajustar cuentas con aquellos que nos han herido antes, de una forma u otra. Y regresar tras un momento de debilidad quizás nos hace ver que necesitamos ayuda para iniciar de nuevo nuestro negocio empresarial, aunque sea el asesinato. Por eso Nemesis va a buscarse un adlátere, un compañero no, llamémosle un ayudante, alguien joven al que poder domar a la medida de las necesidades, despiadado, comprometido con la causa, tan sanguinario como su maestro o más si cabe.
Enfrente de ambos se orquesta una vendetta diferente, una que permanecía escondida a nuestra vista en cierta manera. Nemesis ya había tenido un secuaz anteriormente y ahora se ha dedicado a reunir a otros muchos afectados por las acciones del villano para que le ayuden a acabar con él. Por lo tanto tenemos una especie de bucle vengativo en ciernes que va a monopolizar la trama hasta su inesperado final.
El personaje volverá, al menos así nos lo deja claro la última splash page, con intenciones muy claras, las de dominar el mundo. Y ya sabemos que cuando algo se le mete entre ceja y ceja es complicado detener a este maldito cabronazo.
Resurgir del mal
En anteriores entregas de otras series de Mark Millar hemos ido viendo cómo se diluía gran parte del efecto de los primeros volúmenes, como material prometedor iba dejando paso a momentos efectistas y muy cinematográficos en detrimento de una buena trama. Mucho recurso artístico para dar una sensación de grandeza pero dejando ese poso de más de lo mismo. Pero cuando se trata del verdadero mal, de un villano sin remedio ni redención, Millar da lo mejor de sí mismo.
No ha perdido ese toque de sorprender con grandilocuencia pero cuando trata con héroes se difumina más, parece que disfruta verdaderamente generando el terror con Nemesis.
Para la parte gráfica el elegido en esta ocasión ha sido Valerio Giangiordano, ilustrador italiano que alcanza un magnífico nivel representando al brutal asesino. Con un estilo de esos que podemos llamar “sucio”, logra dotar de una atmósfera ideal a un mundo donde los suelos brillan hasta que la sangre y las vísceras los cubren por completo.
Entre robos y muertes no conseguimos echar en falta nada que Steve McNiven o Jorge Jiménez pudieran aportar en los tomos anteriores, por lo que la terna que han llegado a formar los tres dotan al conjunto de una luz propia dentro de las obras de Millar. Muy entretenido, muy fiel al personaje y con giros hasta el mismísimo final. Me lo he pasado bien, espero que la siguiente vez que me encuentre con Nemesis siga siendo al menos igual.
Nemesis Rogue’s Gallery
NOTA CINEMASCOMICS
TOTAL
¡La secuela de Big Game! ¡El regreso de uno de los más populares personajes del Millarworld! Tras los sucesos del monumental crossover, Némesis está prácticamente muerto: roto y destruido. Sólo le quedan sus ansias de vengarse de aquellos que le han hecho daño. La sangrienta venganza comienza aquí, con la elección de un joven ayudante, destinado a ser tan peligroso y demente como él.




