Han pasado 14 años desde la última entrega, pero ya está aquí Destino final: Lazos de sangre, y lo ha hecho con más fuerza que nunca. A estas alturas, con más de 110 millones recaudados en taquilla y un presupuesto de 50 millones, nadie puede negar que esta saga sigue muy viva. Pero la gran pregunta es: ¿Por qué hemos tenido que esperar tanto?
Spoiler: No ha sido por falta de ganas.
No es que se olvidaran de la saga… Es que no era tan fácil
Glen Morgan, productor de la nueva entrega y co-guionista original de la primera película, lo tiene claro: Hacer una película de Destino Final no es precisamente un paseo por el parque. Y lo explica así en CB:
«Estas películas son muy complicadas. Son desafiantes tanto técnica como creativamente. Tienen que funcionar todas las piezas. Lo plausible y creíble tiene que estar justo en el límite, porque Destino Final vive en ese 1% de probabilidad. Y eso es lo que la hace funcionar».
Y tiene razón. A diferencia de otras sagas de terror que se reciclan con más facilidad, Destino Final necesita ingenio, precisión, y un poco de locura. Porque no vale con matar personajes de forma aleatoria: aquí las muertes son auténticos rompecabezas mortales, más cerca de una coreografía que de una escena sangrienta.
Destino Final: lazos de sangre
Destino final: Lazos de sangre ha sido un rompecabezas de 14 años
El tiempo que ha pasado desde Destino final 5 (2011) hasta Lazos de sangre (2025) parece eterno, pero según Morgan, las circunstancias han tenido mucho que ver. Entre pandemia, huelgas de guionistas y actores, y la dificultad de clavar el guion, el proceso se alargó más de lo previsto.
«El encierro, huelga de actores, dos años para tener el guion listo, eso son ya cinco años y medio o seis. Así que realmente no ha pasado tanto, lo que pasa es que las circunstancias lo complicaron todo».
En resumen: nadie se olvidó de la saga, simplemente todo se puso cuesta arriba. Pero lo importante es que ya está aquí, y ha vuelto con una fórmula que funciona.
¿Y qué ha cambiado con Lazos de sangre?
Lo primero, el tono. Sin perder su esencia macabra y retorcida, esta entrega ha afinado los detalles que hacían que algunas anteriores se sintieran repetitivas. Según Morgan, el parón ha servido para hacer autocrítica y reencontrar el equilibrio:
«Aprendimos mucho sobre qué funcionaba y qué no en las anteriores. Replanteamos muchas cosas y creo que lo conseguimos con Lazos de sangre».
Además, el fichaje de Jon Watts, director de la trilogía de Spider-Man de Tom Holland, fue clave. Se unió como productor y co-creador de la historia, y no vino solo: trajo consigo a los guionistas Guy Busick y Lori Evans Taylor, y seleccionó personalmente a los directores Zach Lipovsky y Adam Stein. La idea que presentaron era tan retorcida como brillante… y no había forma de decir que no.
Destino Final
El alma de la saga sigue intacta
Si hay algo que distingue a Destino Final de otras películas de terror es que no hay un asesino con máscara, ni un monstruo con garras. Aquí el villano invisible es la Muerte misma, que siempre encuentra la forma de cobrarse lo que le pertenece.
Y si algo tenía que mantenerse era esa sensación de «no hay escapatoria», pero con un nuevo giro. En Lazos de sangre no solo hay muertes creativas, hay también una exploración del origen de la maldición. Por primera vez, se abre la puerta a saber de dónde viene todo esto. Y sí, eso ha hecho que muchos salgan del cine queriendo más.
¿Y cómo le ha ido en taquilla?
Muy bien. De hecho, es la entrega que mejor ha abierto en su primer fin de semana en toda la historia de la franquicia. Aunque todavía está en cartelera, ya acumula 110 millones de dólares, superando cómodamente su presupuesto.
Si miramos hacia atrás, esto es lo que han recaudado las anteriores:
- Destino final (2000) – 112 millones
- Destino final 2 (2003) – 90 millones
- Destino final 3 (2006) – 118 millones
- Destino final 4: Línea mortal (2009) – 186 millones
- Destino final 5 (2011) – 157 millones
Lazos de sangre todavía no ha alcanzado a las más taquilleras, pero va camino de hacerlo. Y lo mejor: ha devuelto la fe en una saga que muchos creían dormida.
Lo que viene ahora
¿Habrá una séptima película? Todo indica que sí. No solo por la taquilla, sino porque Lazos de sangre ha dejado muchas puertas abiertas. El equipo ha dicho que hay ideas sobre la mesa, y que el objetivo es no repetir errores del pasado, pero tampoco esperar otros 14 años.
Y ahora que han vuelto con fuerza, sería raro que dejaran escapar este nuevo impulso.
Destino final: Lazos de sangre no llegó antes porque hacer una película así no es cosa fácil. Entre ideas complejas, parones en el mundo del espectáculo, huelgas y perfeccionismo, el proyecto se fue retrasando… Pero el resultado ha valido la pena.
El regreso de esta saga no solo ha sido un éxito, también ha demostrado que las buenas ideas pueden tomarse su tiempo, pero cuando llegan, lo hacen con todo. ¿Te gusta esta saga? Dímelo en comentarios.
