El Gigante Esmeralda se aprovechó de la posibilidad que Marvel tuvo de aumentar el número de publicaciones mensuales para obtener colección en solitario, dejando la compañía que venía teniendo de Namor. Panini Cómics intenta advertir a la población estadounidense del peligro de tener a Hulk suelto por sus calles.
Amenaza real
Si algo ha sido Hulk es un peligro constante para aquellos que le rodean. Durante los primeros pasos de la recuperación de su propia cabecera es un dato que vamos a poder comprobar con cierta facilidad. La bestialidad de comportamiento del Monstruo de Jade le hace no medir sus fuerzas ni sus movimientos, cualquier ciudadano puede ser su víctima si tiene la desgracia de pasar por su lado, incluso de forma fortuita.
No es que pretenda hacer daño pero los débiles humanos se cruzan en su camino con frecuencia, sobre todo si aterriza sobre una calle transitada de cualquier ciudad del país. El alter ego de Bruce Banner no resulta nada amistoso y apenas es capaz de reconocer la bondad de los demás, es mucho más probable que tome cualquier muestra de cariño como un acto violento hacia él mismo, con el control justo para no dejar desierta su serie de personajes secundarios.
La primera en padecerlo siempre ha sido Betty Ross, todavía soltera y sin el añadido del apellido Banner (habría que esperar a los años ochenta del Siglo XX para que esa circunstancia se diera). El drama que vive le afecta más allá de esa amenaza, alcanza casi cotas que ponen en riesgo su salud mental. Ver a su amado convertido en un ser monstruoso que no la reconoce ya es suficiente carga sobre los hombros de la pobre Betty, por lo que si añadimos que su propio padre desea acabar con Hulk, sin preocuparle mucho que detrás se oculte Bruce, se entiende que su angustia pueda ciertamente con ella.
El difícil control
No es solo que Banner no pueda dominar su transformación cuando los nervios o la tensión se apoderan de él, hablamos de lo complicado que es detenerle y someterle bajo ningún plan, artimaña o medio. Aparte de los enemigos que le van surgiendo, como La Encantadora y El Verdugo asgardianos, heredados de la trama que viene del número anterior, El Parásito Espacial, El Rino (heredado de la colección de Spiderman) o El Eslabón Perdido (transformado en un ser bestial y radioactivo), continúa la persecución a la que le somete el Ejército de los Estados Unidos, con el General Ross al frente y el Mayor Talbott como ejecutor principal de las argucias para frenarle.
Sin embargo los aliados también juegan su papel, aunque sea pequeño. Rick Jones permanece atento por si puede servir de ayuda a Banner mientras Betty pasa de mujer en apuros necesitada de un rescate a la chica empoderada que ayudará a su amado mientras no está transformado en el Gigante Esmeralda. Incluso los autores aprovecharán para llevar a cabo uno de los enfrentamientos característicos de la época entre las dos superpotencias nucleares de aquel entonces, sumando a los soviéticos a la operación, aunque solo sea para que tengamos un par de cameos por parte de Nick Furia.
En las garras del Mandarín
Y si tenemos que dar un paso hacia el Telón de Acero y sobrepasar sus fronteras más allá de las Repúblicas Socialistas Soviéticas que mejor destino que la fortaleza del mayor enemigo de otro de Los Héroes más Poderosos de la Tierra, Iron Man.
El Mandarín, situada en las llanuras del Desierto del Gobi, dentro de territorio de China. Todo un conflicto que se vuelve internacional en apenas el tiempo que se tarda en chasquear los dedos. El final de este volumen nos deja la resolución de la aventura para las páginas iniciales del siguiente tomo, mientras Hulk no ha dejado de demostrar que golpear a gigantes amenazadores es su especialidad, sin importar que le sobrepasen ampliamente en tamaño.
El trabajo de Gary Friedrich y la aportación de Roy Thomas, Bill Everett y Archie Goodwin, va dotando a la historia de un trasfondo de debilidad en las transformaciones que Hulk sufre por culpa de su vulnerabilidad a la exposición a la radiación de otros.
Sin embargo solo es un recurso para que un par de fuertes puñetazos no acaben con todo rápidamente. La evolución del personaje apenas consigue apreciarse en estos episodios repletos de acción, donde el menor respiro apenas deja plasmar el sufrimiento que Banner produce en los demás. Marie Severin cumple sobradamente al dibujo, notándose más lustroso el trazo cuando las tintas las aplicas Frank Giacoia. En la recta final tenemos la llegada de Herb Trimpe para tomar el relevo mostrándonos a un Hulk de aspecto más salvaje y con una musculatura más definida. Flojo inicio de la segunda etapa en solitario del personaje.
¿Crees que Hulk merece un mejor regreso en solitario? Déjanos tu opinión en los comentarios.
Biblioteca Marvel El Increíble Hulk Tomo 6
NOTA CINEMASCOMICS
TOTAL
Es más que un cómic: es una máquina del tiempo. ¡El Piel Verde en su propia serie en solitario! Recuerda el origen del Monstruo Gamma. Hulk en Asgard. De vuelta a casa, esperan Rino, la llegada del Eslabón Perdido y El Mandarín. Contiene los correos de lectores de la edición original y la cronología que lo sitúa todo en contexto. ¡Biblioteca Marvel, como siempre y mejor que nunca! ¡No puedes perderte esta edición histórica!
