Atención SPOILERS. El final de Naruto presenta una gran batalla por el destino del mundo, pero la trama se basa en gran medida en una película de Dragon Ball Z de 1990.
Si has visto el final de Naruto y piensas que la historia te suena, es que seguramente conoces la película de Dragon Ball Z «El árbol sagrado». La obra de Akira Toriyama ha tenido una gran influencia en otros animes y mangas como Bleach o One Piece. Pero Masashi Kishimoto (creador Naruto) siempre se ha considerado un gran fan de Dragon Ball, incluso la bestia de cuatro colas se llama Son Gokū y tiene forma de mono gigante.
El final de Naruto es bastante complicado y presenta a Kaguya Ōtsutsuki como la archienemiga de la serie. El gran plan de Kaguya es unir a las diversas Bestias de Cola y reconstruir la versión original de la criatura: el Juubi (Bestia de diez colas). Además de ser un monstruo horrible y poderoso, el Juubi es otra forma del Dios Árbol. El clan Ōtsutsuki viaja de un mundo a otro plantando estos árboles y cuando crecen por completo, sacan la vida de un planeta y su población. Después de cosechar toda la energía que puede reunir, el Dios Árbol produce una fruta de chakra, que los Ōtsutsuki usan para mantener sus vidas y ser más poderosos.
Esta historia que se descubre en el final de Naruto, tiene misteriosas similitudes con la trama de una película animada de 1990 de Dragon Ball Z llamada «El árbol sagrado». En esta película, la Tierra se ve atacada por el villano Saiyan llamado Turles que se parece bastante a Goku. Al igual que Kaguya Ōtsutsuki de la serie de Naruto, Turles ha venido a la Tierra con la mente puesta en plantar un Árbol del Poder.
Al igual que el Dios Árbol, el Árbol del Poder es una construcción natural gigante que se arraiga en la Tierra y absorbe la vida y la energía del planeta.
Como era de esperar, Goku y el resto de héroes no pueden permitir esto y contraatacan a Turles. Goku es mucho más fuerte, hasta que Turles saca una fruta del Árbol del Poder y se la come, lo que demuestra exactamente de dónde proviene ese nombre. Afortunadamente, Goku puede usar la energía acumulada del árbol para una bomba espiritual que salva la situación.
Los paralelismos entre la película de Dragon Ball Z y el final de Naruto son obvios, pero es curioso que Masashi Kishimoto usara una historia similar a una película que no son especialmente queridas por los fans de Dragon Ball. Incluso se podría argumentar que esta influencia es en parte la razón por la cual el final de Naruto resultó divisivo, aparte del repentino cambio de villano y el giro de reencarnación de Asura / Indra. Es poco probable que las similitudes sean meramente una coincidencia. Kishimoto es un fanático confeso de Dragon Ball y esta película fue lanzada 7 años antes de que se imprimiera la primera historia de Naruto.
