Especial ‘Número 9’ con comentarios del director Shane Acker y su equipo e imágenes de concept art de la película.
‘NÚMERO 9’ ha sido realizada con tecnología digital, pero en opinión del director Shane Acker “la tecnología no aporta riqueza a las imágenes, sino los artistas gráficos que usan dicha tecnología. Los genios que crearon las herramientas lo hicieron pensando en quién las usaría, facilitándoles el proceso de creación”.
Acerca de la producción
El equipo de NÚMERO 9 trabajó con el mayor estudio de animación de Canadá, Starz Animation Toronto, que acababa de ampliar sus instalaciones con 4.000 metros cuadrados dedicados a la última tecnología en el centro de Toronto. La producción empezó a principios de 2007 y Shane Acker pudo sumergirse en el mundo que había creado años antes.
Incluso con tecnología digital, una parte de la creación de NÚMERO 9 se basó en técnicas clásicas. Joe Ksander explica: “Los personajes se dibujaron sobre papel, se modelaron en plastilina y se diseñaron en el ordenador. Creamos toda una serie de expresiones que almacenamos en el ordenador para poder modificarlas siempre que fuera necesario”.
Shane Acker dice: “Son marionetas virtuales. Están dentro del ordenador. Se captura un movimiento, el ordenador almacena los datos y lo une con otros para producir la animación”.
El director de animación explica: “Las herramientas están dentro del ordenador. El animador controla las expresiones, los gestos, el movimiento de los labios para que coincida con las palabras”. Esta vez se añadía un importante componente a la narración. Los personajes hablan aunque, como dice la guionista Pamela Pettler, “queríamos que los diálogos fueran mínimos”.
Shane Acker añade: “Descubrimos que era muy difícil contar ciertas cosas, comunicar ciertas emociones sin diálogos. El hecho de que los personajes hablen les da más personalidad”.
Aunque conocidos actores prestan su voz a los personajes, el director tenía la sensación de que “a menudo los personajes de animación carecen de una personalidad muy definida. Quería estar seguro de que las entonaciones serían sutiles, de que los actores hablasen con realismo dramático. Por eso buscamos actores que tuvieran ciertas similitudes con los personajes y que pudieran usar su voz habitual”.
El paisaje donde se mueven los personajes, donde intentan descifrar su pasado y forjar su futuro está “lleno de cosas familiares y conocidas de todos”, explica Shane Acker. “Es un poco como si la estética de la Revolución Industrial hubiera seguido adelante durante cientos de años, y nunca se hubiera superado el diseño de las máquinas a vapor”.
Es una tendencia que se ha dado a conocer últimamente a través de la estética “steampunk”, que une lo funcional y el diseño de encargo con reminiscencias de la era victoriana. Según Ruth La Ferla en el New York Times del 8 de mayo de 2008, “es la expresión estética de un mundo de fantasía que viaja por el tiempo… que se inspira en la extravagante era de los dirigibles y las locomotoras a vapor, escafandras de cobre y protosubmarinos”. Pamela Pettler dice: “Shane tenía en mente los emblemas industriales europeos de mediados del siglo XIX. Hay mucho de eso en NÚMERO 9”. El diseñador de producción Robert St. Pierre añade: “La ciencia de la alquimia tiene un papel clave en la historia y en el diseño de producción. Julio Verne también fue una inspiración”.
Shane Acker explica: “El mundo de Julio Verne ha influido en la estética ‘steampunk’; esta corriente celebra los mecanismos, idolatra y tiene una fe ciega en la máquina como futuro, prefiere el analógico al digital. En NÚMERO 9, dado que el mundo se ha hecho pedazos, todo se ha convertido en analógico”. El director de arte Christophe Vacher añade: “Dada la ambientación posapocalíptica de la película, no sólo hubo que crear objetos, sino también envejecerlos, incluso destruirlos”.
“El mundo de NÚMERO 9 está compuesto de residuos, de lo que ha sobrevivido, y algunos objetos son anacrónicos, pasados de moda”, dice el realizador. “Cada miembro del grupo hace gala de lazos muy claros con el pasado y los seres humanos. Por ejemplo, Número 1 afirma su posición de líder colocándose una moneda en la cabeza y envolviéndose en un trozo de terciopelo rojo. La tribu existe, sus miembros y su cultura maduran en un ambiente poshumano”.
La película ha sido producida por Tim Burton y Timur Bekmambetov.