El momento que millones de jugadores llevaban años esperando por fin está aquí: Call of Duty da el salto al cine con dos nombres que son dinamita pura en Hollywood. Paramount Pictures ha fichado a Taylor Sheridan y Peter Berg, y con semejante equipo, las expectativas ya están por las nubes.
La franquicia Call of Duty lleva más de dos décadas reinando en el mundo de los videojuegos. Desde su debut en 2003, ha redefinido una y otra vez el género de los shooters en primera persona, convirtiéndose en un fenómeno cultural. Cada año, millones de jugadores se lanzan al campo de batalla virtual en títulos que combinan acción trepidante, tecnología punta y un realismo bélico sin precedentes. Y lo mejor de todo: otro nuevo juego llega en apenas dos semanas. O sea, que la saga está más viva que nunca.
Call of Duty es una saga que se merecía su gran salto a la pantalla
Call of duty
A pesar de su éxito arrollador en consolas y PC, Call of Duty nunca se había atrevido a dar el paso hacia la gran pantalla. Parte de culpa la tenía ese viejo estigma de que las películas basadas en videojuegos estaban “malditas”. Pero los tiempos han cambiado, y el público ya ha demostrado que sí se pueden hacer adaptaciones de videojuegos espectaculares, como The Last of Us, Fallout o Super Mario Bros.
Así que Paramount ha decidido lanzarse de lleno a la misión más ambiciosa de su historia: llevar Call of Duty al cine con una película de acción real.
Taylor Sheridan y Peter Berg: la pareja perfecta para la guerra
Según informó Variety, Paramount ha fichado a Taylor Sheridan y Peter Berg para encargarse del proyecto. Y si estos nombres te suenan, no es casualidad. Sheridan es el creador del universo Yellowstone, además de guionista de Sicario y Comanchería. Vamos, que de conflictos armados y tensión sabe un rato.
Por su parte, Peter Berg es un experto en cine militar y acción intensa. Dirigió El único superviviente, Mile 22 y Battleship, entre otras. Su estilo directo y visceral encaja a la perfección con lo que los fans esperan de Call of Duty: adrenalina, fuego cruzado y decisiones al límite.
¿No crees que es una combinación demasiado buena para ser verdad?
Lo curioso es que ambos ya habían trabajado juntos antes. Berg produjo Comanchería y Wind River, dos películas escritas por Sheridan, así que su química profesional está más que probada. De hecho, fuentes cercanas aseguran que Paramount quiere aprovechar esta sinergia antes de que Sheridan empiece su próxima etapa en NBCUniversal. Vamos, que han movido ficha justo a tiempo.
¿Qué podemos esperar de la película de Call of Duty?
Por ahora, los detalles del argumento son un misterio. Sheridan y Berg co-escribirán el guion, con Berg también como director, pero no se sabe si adaptarán una historia concreta de los juegos o crearán una trama completamente nueva.
Teniendo en cuenta la cantidad de conflictos que ha explorado la saga Call of Duty, desde la Segunda Guerra Mundial hasta guerras futuristas y batallas de espionaje moderno, el abanico de posibilidades es enorme. Pueden elegir prácticamente cualquier escenario y hacerlo reconocible al instante para los jugadores.
Call of Duty
Imagina una mezcla de Sicario con Modern Warfare… Sí, suena demasiado bien.
La apuesta segura de Paramount
Desde la perspectiva del estudio, esta elección parece un movimiento calculado. Sheridan y Berg son dos nombres de confianza, capaces de ofrecer un espectáculo sólido sin demasiados riesgos. Paramount no busca reinventar el cine bélico, sino construir una franquicia segura y rentable.
Al final, un Call of Duty que cumpla con lo esperado y arrase en taquilla puede abrir la puerta a un universo cinematográfico con secuelas, precuelas y spin-offs. Y en estos tiempos, eso vale oro.
Porque seamos sinceros: una película que guste al público vale más que una que trate de ser demasiado “artística”. Y Paramount lo sabe.
Pero… ¿y si es demasiado predecible?
Claro, también está el otro lado de la moneda. Algunos críticos ya señalan que Sheridan y Berg podrían ofrecer algo demasiado “seguro”. Ambos dominan el género, pero precisamente por eso, existe el riesgo de que la película de Call of Duty sea demasiado predecible.
Al fin y al cabo, el público ya puede imaginar el estilo, el tono y hasta el tipo de escenas que veremos: explosiones, soldados bajo fuego, dilemas morales y música militar. Todo eso está bien… pero ¿y la sorpresa?
Ahí está la gran incógnita.
Por qué Call of Duty sigue siendo un fenómeno
Vale la pena recordar que Call of Duty no es solo una saga de tiros y explosiones. Es una experiencia que ha evolucionado con el tiempo, pasando de combates históricos a guerras modernas, futuristas e incluso zombis.
El secreto de su éxito está en cómo logra que cada partida se sienta cinematográfica. Las campañas son intensas, los personajes memorables y el multijugador es casi una religión. Call of Duty no solo es un videojuego: es un evento anual que une a millones de jugadores en todo el mundo.
Por eso su salto al cine parece inevitable. La marca ya lo tiene todo: acción, personajes icónicos y reconocimiento global.
¿El principio de una nueva guerra?
Todo apunta a que el rodaje de Call of Duty arrancará en 2026, aunque aún no hay fecha oficial de estreno. Si todo sale bien, Paramount podría tener entre manos una de las franquicias más potentes del cine moderno, uniendo a los fans del videojuego con el gran público.
Y lo mejor es que, si funciona, podríamos ver un nuevo universo cinematográfico de acción bélica con el sello Call of Duty. ¿Te imaginas una trilogía con campañas diferentes, estilos visuales únicos y cameos de actores sorpresa? Yo ya estoy haciendo la quiniela mental.
En definitiva, Call of Duty llega al cine con un equipo de lujo y una promesa clara: llevar la intensidad del videojuego a la gran pantalla. Quizá no sea la apuesta más arriesgada, pero sí la más sensata. Sheridan y Berg saben perfectamente cómo hacer que cada bala, cada explosión y cada silencio pesen.
¿Te gustaría verla en cines o prefieres que se quede en los mandos? Cuéntanoslo en la sección de comentarios.
