Hay películas que se estrenan… y hay películas que llegan, se plantan en la cartelera y dicen: “esto es mío”. Avatar: Fuego y ceniza pertenece claramente al segundo grupo. Mientras medio mundo se reparte las sobras navideñas, la nueva odisea de Pandora sigue dominando la taquilla con una tranquilidad que roza lo insultante. Y sí, todo apunta a que esto va para largo.
Desde su estreno, Avatar: Fuego y ceniza está demostrando que James Cameron no hace películas para ganar un fin de semana, sino para marcar territorio durante meses. El público vuelve, repite, recomienda… y la caja registradora no descansa ni siquiera cuando llegan estrenos con ganas de guerra. Spoiler: ninguno ha conseguido hacerle sombra de verdad.
Avatar: Fuego y ceniza no se mueve del trono, ni con empujones
El tercer capítulo de la saga dirigida por James Cameron ha sumado 64 millones de dólares en su segundo fin de semana tradicional y 88 millones desde el arranque del periodo navideño. Lo interesante no es solo la cifra, sino el dato fino: la caída respecto al estreno es de apenas un 28%. En taquilla, eso es una sonrisa de oreja a oreja.
Avatar: Fuego y ceniza (2025)
Para ponerlo en contexto, El sentido del agua cayó un 52% tras debutar con números más altos. Avatar: Fuego y ceniza, en cambio, parece haber encontrado ese punto dulce donde el boca a boca hace más trabajo que cualquier tráiler. En Estados Unidos ya roza los 218 millones y, a nivel mundial, supera con holgura los 760 millones tras solo dos fines de semana.
Lo más llamativo es la sensación de calma. No hay prisas, no hay pánico. Todo indica que Avatar: Fuego y ceniza se quedará liderando la taquilla bien entrado el nuevo año, siguiendo la estela de las dos entregas anteriores, que estuvieron siete semanas consecutivas en lo más alto y acabaron superando los 2.000 millones cada una. Palabras mayores.
Los estrenos navideños lo intentan… pero Pandora pesa mucho
Estas Navidades no han sido precisamente flojas en estrenos. Aun así, ninguno ha conseguido discutirle el liderazgo real a Avatar: Fuego y ceniza. El mejor debut ha sido para Marty Supreme, la nueva apuesta de A24, que ha arrancado con 17,4 millones en el fin de semana y más de 27 millones contando los festivos.
Timothée Chalamet en Marty Supreme
Detrás de este buen arranque hay dos nombres claros: Josh Safdie en la dirección y Timothée Chalamet como protagonista. El actor se ha convertido, directamente, en una campaña de marketing con piernas, y el público joven ha respondido. Más del 65% de los espectadores tiene menos de 35 años, algo nada habitual en este tipo de dramas deportivos.
Aun así, la realidad es tozuda. Marty Supreme ha gustado, tiene buenas críticas y comentarios positivos, pero juega en otra liga presupuestaria y comercial. Frente al músculo industrial de Avatar: Fuego y ceniza, cualquier producción más pequeña necesita tiempo, constancia y paciencia para justificar su inversión.
Anaconda, música y thrillers: variedad, pero sin sorpasso
En el otro extremo del espectro está Anaconda, el meta-reboot protagonizado por Jack Black y Paul Rudd, que ha debutado con 14,6 millones en Estados Unidos y unos sólidos 43,7 millones a nivel global. No está mal, pero tampoco es una locura. El público ha estado dividido y las críticas se mueven en terreno tibio, lo que suele pasar factura a medio plazo.
Anaconda
Más abajo encontramos Song Sung Blue, con Hugh Jackman y Kate Hudson, que ha conectado especialmente bien con el público adulto. Su nota “A” en CinemaScore es la mejor entre los estrenos recientes, y todo apunta a que crecerá poco a poco gracias al boca a boca. Eso sí, su perfil es muy distinto al de Avatar: Fuego y ceniza.
También resiste con fuerza The Housemaid, thriller psicológico con Sydney Sweeney y Amanda Seyfried, que ya acumula cifras más que respetables. Pero, de nuevo, ninguna de estas propuestas parece capaz de mover a Avatar: Fuego y ceniza de su cómodo asiento en lo más alto.
Amanda Seyfried y Sydney Sweeney en The Housemaid (2025)
El dominio de Disney y un año que se queda a medias
Mientras Avatar: Fuego y ceniza sigue a lo suyo, Disney también celebra otro éxito paralelo. Zootrópolis 2 ha vuelto al segundo puesto con 20 millones más este fin de semana y ya suma 1.420 millones de dólares en todo el mundo, convirtiéndose en la película de Hollywood más taquillera del año.
Zootrópolis 2 (2025)
El contraste es curioso. Por un lado, Pandora y sus épicas acuáticas y volcánicas. Por otro, una secuela animada que no deja de atraer familias semana tras semana. Dos estilos muy distintos, pero un mismo resultado: el público responde cuando hay evento cinematográfico de verdad.
Eso sí, ni siquiera este empujón final ha sido suficiente para que la taquilla estadounidense alcance los ansiados 9.000 millones anuales. El año cerrará alrededor de los 8.870 millones, una cifra ligeramente superior a la del año pasado, pero todavía lejos de los niveles de 2019.
Avatar: Fuego y ceniza, la reina silenciosa de la cartelera
Lo fascinante de Avatar: Fuego y ceniza no es solo lo que recauda, sino cómo lo hace. Sin prisas, sin caídas bruscas, sin esa sensación de “todo ahora o nunca”. Cameron vuelve a demostrar que su cine funciona como una maratón, no como un sprint. Y el público, una vez más, le sigue el ritmo.
Con semanas fuertes por delante y poca competencia directa en el horizonte, todo apunta a que Pandora seguirá siendo el lugar más visitado de la cartelera durante bastante tiempo. Y sinceramente, viendo cómo está funcionando, nadie parece tener demasiadas ganas de discutirle el sitio.
Recuerda que las 2 primeras entregas de la saga de James Cameron están en Disney Plus.
Ahora te toca a ti: ¿crees que Avatar: Fuego y ceniza acabará alcanzando cifras cercanas a las dos primeras películas o se quedará “solo” en un taquillazo enorme? Te leemos en comentarios y, si no quieres perderte ninguna locura más de taquilla, ya sabes: síguenos también en Google News.


