El primer tráiler y nada menos que 17 pósters de personajes de Street Fighter acaban de soltarse en pleno evento de The Game Awards y, sí, es de esos momentos en los que paras todo y miras la pantalla con una sonrisa medio incrédula. La adaptación en acción real va en serio… y quiere que lo sepas desde ya.
Legendary y Capcom han enseñado por fin sus cartas con Street Fighter, una película que llevaba años flotando en el limbo y que ahora se presenta con músculo, poses imposibles y una galería de luchadores que parecen haber salido directamente del arcade. Y para bien o para mal, aquí no hay medias tintas.
Street Fighter se presenta a lo grande: pósters, tráiler y World Warriors
El tráiler no entra demasiado en la historia, pero tampoco lo necesita. Esto va de presentar a los World Warriors, de dejar claro quién pega, cómo pega y por qué deberías tener ya esta película marcada en rojo en el calendario. Ryu, Ken, Chun-Li, Guile, Blanka, Vega, Balrog… todos están aquí, y lo hacen con una fidelidad visual que roza lo obsesivo.
Cada póster es una declaración de intenciones. Frases grandilocuentes, miradas de “te voy a reventar en el torneo” y una estética que abraza sin complejos el ADN de Street Fighter. No intenta ser realista ni esconder su origen en los videojuegos. Al contrario, lo potencia. Y eso, sinceramente, se agradece.
Andrew Koji como Ryu transmite disciplina, silencio y puños curtidos. Noah Centineo como Ken va justo al otro extremo: carisma, sonrisa chulesca y esa sensación de que siempre está disfrutando demasiado del combate. La química entre ambos es clave, y el material promocional ya empieza a jugar con esa rivalidad clásica.
Un reparto tan loco como potente
Uno de los grandes golpes sobre la mesa de Street Fighter es su reparto. No es solo variado, es directamente inesperado. Jason Momoa como Blanka suena raro… hasta que lo ves. Y entonces encaja de una forma extraña, salvaje, casi incómoda. Lo mismo pasa con 50 Cent como Balrog, pura presencia física y mirada de “esto es solo un trabajo más”.
Callina Liang como Chun-Li aporta elegancia y determinación, mientras Cody Rhodes como Guile parece haber nacido para llevar ese peinado imposible y soltar discursos patrióticos entre puñetazo y puñetazo. Orville Peck como Vega es puro exceso estético, máscara incluida, y Mel Jarnson como Cammy apunta a ser una de las grandes sorpresas.
Y ojo con Roman Reigns como Akuma. Solo con leer el nombre ya te imaginas el tipo de energía que va a desprender. No es sutileza, es fuerza bruta y presencia intimidante. De esas que llenan la pantalla aunque no digan una palabra.
Capcom
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Una historia clásica, directa y sin rodeos
Ambientada en 1993, Street Fighter nos presenta a Ryu y Ken como luchadores distanciados, obligados a reencontrarse cuando Chun-Li los recluta para el próximo World Warrior Tournament. Un torneo brutal, físico y emocional, donde no solo se reparten golpes, también salen a flote cuentas pendientes y viejos demonios.
Detrás del torneo hay algo más. Una conspiración que empuja a los combatientes a enfrentarse no solo entre ellos, sino consigo mismos. El tráiler lo deja claro: esto no es solo ganar o perder. Es sobrevivir. Y si fallan… GAME OVER. Literalmente.
La historia no pretende reinventar nada. Y eso juega a su favor. Street Fighter entiende su legado y se apoya en él: rivalidades, honor, combates imposibles y villanos que disfrutan demasiado del caos. David Dastmalchian como M. Bison promete ser uno de esos antagonistas que se quedan grabados, más por presencia que por discursos largos.
Fidelidad visual: virtud y riesgo
Hay algo que queda clarísimo con estos pósters y el tráiler: Street Fighter ha decidido ser fiel al videojuego hasta las últimas consecuencias. Vestuarios, colores, poses, expresiones… todo remite directamente a las recreativas. Eso va a encantar a muchos y chirriar a otros. Es inevitable.
Pero lo interesante es que no parece una decisión tímida. Aquí no hay complejos. Si Guile tiene que parecer una caricatura musculada, lo será. Si Dhalsim tiene que estirar los brazos de forma imposible, adelante. Vidyut Jammwal encarna esa rareza con convicción, y eso es justo lo que necesita este tipo de adaptación.
Eric André como Don Sauvage y Andrew Schulz como Dan Hibiki aportan el toque más descarado y autoparódico, algo muy en la línea del espíritu Street Fighter. Porque sí, hay golpes, hay épica… pero también hay humor y exageración consciente.
Fecha de estreno y lo que viene después
Dirigida por Kitao Sakurai y ahora distribuida por Paramount Pictures, Street Fighter ha retrasado su estreno unos meses y finalmente llegará a los cines el 16 de octubre de 2026. Puede parecer lejos, pero con este despliegue promocional está claro que la maquinaria ya está en marcha.
La gran pregunta es si funcionará como película más allá del espectáculo visual. Pero viendo el enfoque, el reparto y el tono, da la sensación de que Street Fighter no quiere pedir perdón por lo que es. Quiere que entres en la sala, te sientes, y disfrutes del combate.
Y eso, en tiempos de adaptaciones con miedo a su propio origen, ya es una victoria.
Ahora la pelota está en tu campo: ¿te convence esta versión de Street Fighter o te deja con dudas? ¿Cuál de los pósters te ha ganado por KO? Cuéntanos qué te ha parecido y no olvides seguirnos en Google News para no perderte ni un solo round del cine y la cultura pop.
