El Señor de los Anillos vuelve a los cines, ya que van a pasar 25 años desde su estreno y esta es la mejor forma de celebrarlo. Lo mejor de todo es que la Tierra Media ha envejecido bien y siguen siendo unas películas épicas.
Así que, tenemos una nueva oportunidad de volver a ver a Frodo, Aragorn y compañía en pantalla grande y compartir esta aventura con las nuevas generaciones de espectadores.
El Señor de los Anillos vuelve a levantar a medio planeta del sofá
La culpa de este regreso a las salas la tiene Fathom Entertainment, que ha decidido que enero de 2026 es el momento perfecto para celebrar los 25 años de El Señor de los Anillos: La Comunidad del Anillo. Sí, veinticinco… ¡Cómo pasa el tiempo!
La jugada tiene un punto épico que mola mucho: no hablamos de un reestreno cualquiera, sino de un evento dividido en dos fines de semana completos, del 16 al 18 y del 23 al 25 de enero. Si eres de los que organiza su vida alrededor de los maratones, esto te va a venir como anillo… bueno, ya sabes.
Las entradas ya están a la venta, así que no te duermas en los laureles como si fueras un hobbit después de un segundo desayuno. El fenómeno El Señor de los Anillos siempre mueve montañas, y no precisamente las de Mordor.
Sauron de El Señor de los Anillos
Peter Jackson vuelve a reinar en pantalla grande
Según explica Ray Nutt, jefe máximo de Fathom Entertainment, la trilogía de El Señor de los Anillos no solo marcó un antes y un después en el cine fantástico, sino que demostró que se podían hacer milagros visuales sin que se te derrita el cerebro mirando la factura de CGI. Y tiene razón: aquellas películas siguen viéndose como un sueño húmedo de Weta Workshop.
Para esta celebración, van a proyectarse las ediciones extendidas (sí, las de verdad, las largas, las gloriosas, las que duran lo que un vuelo transoceánico). Y ojo al dato: habrá pases en 4DX, para que cuando Legolas se deslice por un olifante lo sientas hasta en el alma. ¿Era necesario? No. ¿Lo queremos? Claramente sí.
Esta iniciativa demuestra algo que ya se veía venir: el público tiene hambre de revivir clásicos en pantalla grande. Aunque lo de clásico duela. Pero si una historia ha sabido sobrevivir durante siglos en libros, manuscritos y adaptaciones teatrales, ¿Cómo no iba a hacerlo El Señor de los Anillos con su ejército de orcos, tipos con barba épica y hobbits con más carisma que muchos protagonistas actuales?
Merch, nostalgia y un mapa para llegar al dinero de nuestra cartera
Como no podía faltar el componente coleccionista, la celebración del 25 aniversario trae consigo una tentación más peligrosa que un anillo brillante en el suelo: los nuevos cubos de palomitas oficiales. Y no cualquier cubo, no.
Los modelos que se han visto incluyen mapas de la Tierra Media, acabado metálico y agárrate, imanes. Es decir, no solo sirven para comer palomitas, sino también para decorar la nevera y recordar lo que te gastaste en palomitas. El marketing hace su magia y nosotros picamos con alegría.
Eso sí, aviso: estos cubos estarán disponibles solo en salas AMC participantes. Así que si tu cine de confianza no es AMC, tocará buscar alternativas.
Un repaso rápido a La Comunidad del Anillo
Y ya que estamos celebrando el regreso de El Señor de los Anillos, toca recordar de qué iba La Comunidad del Anillo, por si algún despistado lleva décadas evitando spoilers.
La historia arranca en la apacible Comarca, donde un joven hobbit llamado Frodo Bolsón recibe un objeto que parece un sencillo anillo, pero que en realidad es la mayor maldición creada por Sauron, el tipo con más mala vibra de la Tierra Media. A partir de ahí, Frodo acaba embarcándose en el viaje más épico de su vida.
Para protegerlo, se forma la emblemática Comunidad del Anillo: Aragorn, el heredero sin corona; Legolas, el elfo con puntería irreal; Gimli, la definición de lealtad y mala leche; Boromir, profesional en equivocarse; Gandalf, el mago que siempre llega cuando le da la gana; y los hobbits Sam, Merry y Pippin, que aportan humor y valentía en igual medida.
La misión: llevar el Anillo Único hasta Mordor para destruirlo en el Monte del Destino. El camino: bosques, ríos, minas, traiciones, orcos, espectros, sustos, magia y escenas que han quedado grabadas en la historia del cine. Es imposible no entender por qué El Señor de los Anillos dejó una marca tan grande en millones de espectadores.
La comunidad del anillo
Un regreso que huele a evento generacional
El reestreno de El Señor de los Anillos en cines no es solo una maniobra comercial; es un recordatorio de que hay películas que forman parte de la vida de la gente. La banda sonora de Howard Shore sigue poniendo la piel de gallina. Los paisajes de Nueva Zelanda continúan pareciendo algo salido de un sueño. Y las frases míticas siguen funcionando igual de bien durante una cena, una discusión o una mudanza.
Volver a ver la trilogía en pantalla grande será una especie de ritual colectivo. Los que la vivimos entonces iremos a revivirla; los que la descubren ahora podrán experimentarla como debe ser: con sonido atronador, butacas temblando y esa sensación de aventura que te hace querer comprar una capa élfica aunque no te quede bien.
Además, este tipo de reestrenos dan pistas claras de hacia dónde va la industria: recuperar grandes títulos, reactivar la magia del cine y recordarnos por qué nos enamoramos de esto en primer lugar. Y oye, si de paso nos permiten volver a Mordor sin morir en el intento, mejor todavía.
Y ahora te toca a ti: ¿vas a volver a ver El Señor de los Anillos en el cine o prefieres quedarte en la Comarca con un té? Cuéntanos en comentarios y síguenos en Google News para más aventuras épicas.


