Si alguna vez pensaste: “Ojalá pudiera jugar a un shooter donde cada decisión tenga consecuencias, cada disparo te cueste el botín, y encima pueda escuchar cómo un desconocido me pide ayuda con voz temblorosa” … enhorabuena, ARC Raiders está hecho para ti.
Embark Studios nos lanza a un mundo donde la Tierra ya no manda. Las máquinas ARC se han hecho las jefas y la humanidad malvive bajo tierra. Pero claro, la curiosidad humana no entiende de advertencias: basta con oír “no salgas” para que estemos fuera, saqueando con una sonrisa y una mochila medio rota.
La supervivencia tiene estilo
Visualmente, el juego es una pasada. Con una ambientación que mezcla Mad Max, Helldivers 2 y un toque retro-sci-fi que le sienta de lujo. Cada expedición a la superficie se siente como una misión suicida con posibilidades de alguna jugada épica.
Las físicas, las animaciones y el sonido te meten de lleno en el fregado. Nada de disparar y correr sin pensar: aquí cada bala cuenta, y cada encuentro puede acabar en un «GG» o en un «¿pero quién me mató?».
Y ojo, porque el chat de proximidad no es un detalle menor: es
la salsa secreta del juego. Imagina esto: te topas con otro
jugador, los dos apuntándoos, y en vez de abrir fuego, decides
hablar.
“¿Trato?” “¿Nos repartimos el loot?” “¿Eh, por qué me estás
apuntando?” Ese instante de tensión social es oro puro. En
serio, la mitad de la experiencia es decidir si confías o si te
preparas para traicionar.
El poder de la voz (y la traición)
El chat de proximidad convierte ARC Raiders en una montaña rusa emocional. Puedes empezar ayudando a un jugador herido y acabar robándole su mochila dos minutos después (no somos santos, vale). Pero también genera momentos únicos: alianzas improvisadas, rescates de película, y ese tipo de historias que luego cuentas a tus amigos con una sonrisa y sudor en las manos.
Nada de «matchmaking frío» o silencios incómodos: aquí se escucha la respiración, los nervios y las risas. Es un juego que, más allá de disparar, te invita a hablar. Y eso, en pleno 2025, ya es un logro.
No todo brilla bajo la superficie
Como buen extraction shooter, ARC Raiders no te lo pone fácil. Si mueres, pierdes el botín. Si te desconcentras, te caza un dron o un francotirador con mala leche. Es un título exigente, no para el jugador de sofá y manta. Y sí, los servidores a veces sufren cuando la gente se anima en masa. También hay algún bug que te arranca una carcajada (o un grito). Pero nada que empañe lo que el juego consigue: tensión, adrenalina y diversión con sabor amargo.
Sobrevivir nunca fue tan divertido (ni tan social)
ARC Raiders no inventa el género, pero lo refresca con estilo. El chat de proximidad le da una personalidad brutal, los combates son intensos y el apartado artístico es un espectáculo, a veces frustrante, a veces glorioso, pero siempre emocionante. Un título que brilla cuando lo juegas en compañía, aunque sea con extraños… sobre todo con extraños.
¿Tú también has vivido una traición épica en ARC Raiders? Cuéntanos tu experiencia en comentarios. Síguenos en Google News para no perderte nuestras reviews de juegos con alma (y balas). Y si aún no lo has probado, puedes comprar ARC Raiders para PC, PS5 y Xbox Series X|S a través de la web oficial.
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