Netflix no para de sorprender y, cuando creías que ya lo habías visto todo, aparece una propuesta inesperada que amenaza con convertirse en la próxima obsesión mundial. Esta vez no se trata de superhéroes ni de thrillers políticos británicos, sino de algo mucho más curioso: una serie coreana que mezcla viajes en el tiempo, cocina y un rey con muy mal genio.
¿Suena extraño? Pues precisamente ahí está el secreto. «Bon Appétit, Your Majesty«, también conocida como The Tyrant’s Chef, acaba de aterrizar en Netflix tras estrenarse en la televisión surcoreana y ya ha comenzado a escalar posiciones en el ranking global. Nadie la esperaba, nadie hablaba de ella… y en cuestión de horas se ha colocado entre lo más visto de la plataforma.
La fórmula de la nueva serie coreana
En los últimos años, las producciones de Corea del Sur se han convertido en uno de los grandes motores de Netflix. Desde el fenómeno mundial de El juego del calamar hasta las producciones más recientes como KPop Demon Hunters, está claro que cuando llega una serie coreana con la mezcla justa de originalidad y emoción, puede arrasar en cualquier rincón del planeta.
La premisa de Bon Appétit, Your Majesty es tan peculiar que resulta irresistible: una chef formada en la alta cocina francesa es transportada al pasado, concretamente al palacio real, donde debe cocinar para un rey tan talentoso con el paladar como peligroso con su carácter. Sí, hablamos de un monarca capaz de mandar a cualquiera a la guillotina si la salsa no tiene el punto exacto.
Bon Appétit, Your Majesty
¿Por qué todo el mundo habla de ella?
Lo fascinante de esta serie coreana es que llegó sin apenas promoción internacional. Nada de campañas gigantes, ni tráilers en Times Square, ni entrevistas interminables con el reparto. Simplemente apareció, y el boca a boca digital hizo el resto.
En IMDb ya acumula reseñas muy positivas. Algunos la califican como «el enésimo drama de viajes en el tiempo made in Korea», pero otros destacan que tiene «el equilibrio perfecto entre comedia romántica y drama palaciego». Al fin y al cabo, si algo ha demostrado la televisión surcoreana es que puede darle la vuelta a los clichés hasta convertirlos en éxitos globales.
La herencia de El juego del calamar
Es imposible no mencionar que todo este boom internacional empezó gracias a El juego del calamar. Aquel fenómeno demostró que una serie coreana podía no solo competir, sino superar en popularidad a las producciones estadounidenses más ambiciosas. Desde entonces, Netflix ha apostado fuerte por traer cada año nuevas historias con ese sello tan característico: emoción, dramatismo y un punto de locura creativa.
Bon Appétit, Your Majesty hereda parte de ese espíritu. No necesita efectos visuales deslumbrantes ni un presupuesto millonario: se apoya en una historia fresca, un concepto rompedor y un reparto capaz de transmitir emociones con un simple gesto.
Bon Appétit, Your Majesty
Una experiencia semanal, no de maratón
A diferencia de otros lanzamientos de Netflix que llegan con todos los capítulos de golpe, esta serie coreana mantiene la emisión semanal al ritmo de su cadena original en Corea del Sur. Eso significa que cada fin de semana los espectadores tendrán una cita para descubrir cómo evoluciona la relación entre la chef y el tirano.
Esta estrategia no solo mantiene viva la conversación, sino que multiplica las teorías en redes sociales. ¿Será el rey un villano implacable hasta el final? ¿Habrá romance entre el verdugo de los cocineros y la mujer que intenta sobrevivir con su talento culinario?
¿La próxima gran exportación cultural de Corea?
Corea del Sur no solo exporta K-pop o películas premiadas como Parásitos. Ahora, con cada serie coreana que logra un hueco en el top de Netflix, refuerza su imagen como fábrica de entretenimiento global. Y Bon Appétit, Your Majesty parece encajar a la perfección en esa tendencia.
La mezcla de géneros (histórico, fantasía, comedia romántica) recuerda a lo que ya hemos visto en títulos como Mr. Queen o Moon Lovers, pero con un aire fresco que atrapa desde el primer episodio. Es justo esa combinación la que podría convertirla en el próximo fenómeno mundial.
Lo que opinan los primeros espectadores
Aunque aún no hay críticas oficiales en portales como Rotten Tomatoes, las reseñas iniciales apuntan a que esta serie coreana es adictiva y entrañable. Entre los comentarios más repetidos destacan:
- “Tiene el mejor aroma de comedia romántica de los últimos años.”
- “Cada episodio se siente como una receta única, con suspense, humor y un toque de tragedia.”
- “Es la clase de show que no sabías que necesitabas hasta que lo pruebas.”
El futuro inmediato
Con solo dos episodios estrenados y ya en lo más alto de Netflix, todo apunta a que Bon Appétit, Your Majesty será un tema recurrente en las próximas semanas. Si consigue mantener el nivel, no sería extraño que se convirtiera en la sucesora espiritual de El juego del calamar.
Y es que, al final, lo que parece una simple serie coreana sobre una chef perdida en el tiempo podría convertirse en el plato estrella de la temporada.
Bon Appétit, Your Majesty no es solo otra novedad en el catálogo de Netflix. Es la confirmación de que Corea del Sur sigue marcando el ritmo en el entretenimiento global. Y si todavía no la has visto, prepárate, porque lo que comenzó como una receta improvisada puede convertirse en el menú que todos quieran probar.
Recuerda que el catálogo de Netflix varía dependiendo del país en el que te encuentres.




