Puedes corregirme en la sección de comentarios, pero yo creo que nunca se había visto algo así: una película que primero se estrena en streaming y, pocos meses después, llega a los cines para convertirse en número uno de taquilla en Estados Unidos. Eso es exactamente lo que ha logrado Las guerreras k-pop (KPop Demon Hunters) este fin de semana con un bombazo de 18 millones de dólares, desbancando a Weapons.
¿La clave de este fenómeno? Una jugada inesperada: estrenar una versión karaoke de Las guerreras k-pop en la gran pantalla. Y sí, miles de personas acudieron a los cines dispuestos a cantar, bailar y vivir la experiencia como si se tratara de un concierto.
Las guerreras k-pop: de Netflix al número uno en cines
El movimiento sorprende porque hablamos de una película que debutó en Netflix hace apenas dos meses. Allí ya se había convertido en la segunda más vista de la historia de la plataforma, con millones de reproducciones. Pero contra todo pronóstico, ahora la cinta animada se ha convertido también en un éxito de taquilla, algo inédito para un título que nació como contenido en streaming.
Las guerreras k-pop (K-Pop Demon Hunters)
La explicación es sencilla: el fenómeno pop. Tres de las canciones de Las guerreras k-pop (Golden, Your Idol y Soda Pop) han entrado en el top 10 de Billboard, y su fandom estaba deseando una experiencia compartida. La idea del karaoke encendió la chispa: más de 1.150 funciones agotadas en solo un fin de semana.
Una fiesta pop con demonios de fondo
La historia de Las guerreras k-pop no es precisamente la de una típica banda juvenil. En la película, un grupo de chicas idols debe enfrentarse a demonios que amenazan con destruir el mundo, y lo hacen usando el poder de la música. Acción fantástica, estética colorida y canciones pegajosas: la combinación perfecta para enganchar tanto a los más pequeños como a los adultos que crecieron con el fenómeno del K-pop.
Lo curioso es que, aunque el filme está producido por Sony Pictures Animation y dirigido por Maggie Kang y Chris Appelhans, su estreno en salas ha sido casi un experimento. Netflix no suele apostar por los cines, pero esta vez decidió probar suerte y el resultado habla por sí solo.
Competencia feroz en taquilla
El triunfo de Las guerreras k-pop es aún más sorprendente si se tiene en cuenta que su principal rival era Weapons, la última película de terror de Zach Cregger, que venía con buenas cifras y un presupuesto sólido. Sin embargo, el musical animado logró superarla, y eso que solo estaba disponible en 1.700 salas (la mitad de las que suelen tener los grandes estrenos).
Mientras Weapons suma ya más de 115 millones de dólares en EE.UU., la llegada de Las guerreras k-pop a la cartelera ha cambiado el panorama de un fin de semana flojo para la taquilla. Incluso analistas de la industria lo han definido como «el punto brillante de un verano irregular».
Un hito para el streaming y los cines
Lo que hace histórico a este caso es la dirección inversa: primero streaming, luego cine. Hasta ahora, los grandes éxitos solían reestrenarse en salas después de arrasar en cines (como pasó con Avatar o Interstellar en versión IMAX). Pero lo de Las guerreras k-pop rompe las reglas.
Este experimento demuestra que el streaming y las salas no tienen por qué estar enfrentados: pueden retroalimentarse. Netflix logra que la gente vuelva a hablar de su película, los cines recuperan espectadores, y el público se lleva una experiencia única.
Las guerreras k-pop (K-Pop Demon Hunters)
¿Qué viene después para Las guerreras k-pop?
Aunque Netflix no ha dado cifras oficiales, los expertos creen que este éxito acelerará la llegada de una secuela. Y es lógico: la cinta no solo se ha consolidado como fenómeno de masas, también ha demostrado que puede generar ingresos en dos frentes distintos.
Además, el hecho de que cadenas como AMC (la mayor de EE.UU.) no hayan proyectado la película deja un margen de crecimiento si en el futuro amplían el número de salas. Y no olvidemos que el merchandising y la música también empujan el fenómeno mucho más allá de la pantalla.
Un soplo de aire fresco para Hollywood
En un verano donde la recaudación está un 5% por encima del año pasado, pero muy por debajo de lo esperado, el fenómeno de Las guerreras k-pop llega como un recordatorio de que la innovación funciona. Probar fórmulas nuevas, mezclar música con cine y apostar por experiencias colectivas puede ser la receta que salve la taquilla en los próximos años.
En definitiva, Las guerreras k-pop no solo ha derrotado a demonios en la ficción, también ha vencido al escepticismo de Hollywood. Lo que parecía imposible, un estreno en streaming que se convierte en número uno en cines, ya es una realidad histórica. Y lo mejor es que esto puede abrir la puerta a toda una nueva forma de disfrutar del cine: cantando, bailando y compartiendo la magia en comunidad.
