Hay un detalle en las nuevas imágenes del rodaje de la serie de Harry Potter que ha hecho respirar tranquilos a muchos. No es la cicatriz. Ni la varita. Ni siquiera el tren. Es algo que no todos esperaban, pero que puede cambiarlo todo.
Mientras el debate sigue abierto sobre si era necesario reiniciar la saga, HBO ha dejado caer una pista visual que revela una decisión muy clara sobre el tono y la fidelidad de esta nueva adaptación. Una pista que no solo conecta con los libros, sino que los respeta como nunca antes.
El regreso a los 90 para Harry Potter ya es oficial
Las primeras fotos del set han confirmado que la serie no tendrá un aire moderno ni adaptado a la era TikTok, como algunos temían. En cambio, se mantiene fiel a la cronología de las novelas: la historia de Harry empieza en 1991, y eso se nota en el vestuario.
Lejos de mostrar smartphones, filtros de Instagram o uniformes rediseñados para las nuevas generaciones, lo que vemos es una estética puramente noventera. Chándales clásicos, mochilas de la época y cortes de pelo que podrían haber salido de un catálogo de 1993. Todo apunta a que Harry Potter será una serie ambientada realmente en su época, lo que además ayuda a mantener el sentido de asombro: Hogwarts impacta mucho más si vienes de un mundo sin internet.
rodaje serie Harry Potter
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Un paso en la dirección correcta
Mucho se ha dicho sobre el reinicio de Harry Potter en formato serie. Las dudas han girado en torno a la necesidad de hacerlo, al tono que tomaría HBO y, sobre todo, al nivel de fidelidad que tendría respecto a los libros originales de J.K. Rowling.
La saga cinematográfica liderada por Daniel Radcliffe fue todo un hito, pero tomó muchas libertades y dejó fuera momentos, tramas y personajes muy queridos. Ahora, con una serie de varios episodios por libro, la oportunidad de hacer justicia a esos detalles es real. Y este primer vistazo a los trajes de época no es solo un capricho estético: es una declaración de intenciones.
El reparto joven que dará vida a los nuevos magos
Otra de las grandes incógnitas era quién interpretaría a Harry Potter, Hermione y Ron. Ya tenemos respuesta: Dominic McLaughlin será Harry Potter, Arabella Stanton será Hermione Granger, y Alastair Stout interpretará a Ron Weasley. A ellos se suman Lox Pratt como Draco Malfoy, Rory Wilmot como Neville Longbottom, Leo Earley como Seamus Finnigan, Alessia Leoni como Parvati Patil, Sienna Moosah como Lavender Brown y Amos Kitson como Dudley Dursley.
Un grupo joven, desconocido para el gran público, pero que tiene ante sí la oportunidad de redefinir a estos personajes para toda una nueva generación.
Y los adultos no se quedan atrás
El reparto adulto incluye nombres tan potentes como John Lithgow como Albus Dumbledore, Janet McTeer como Minerva McGonagall y Paapa Essiedu como Severus Snape. También veremos a Nick Frost como Hagrid, Luke Thallon como Quirrell, Louise Brealey como Hooch y Paul Whitehouse como Filch.
El elenco lo completan Katherine Parkinson (Molly Weasley), Johnny Flynn (Lucius Malfoy), Bel Powley (Petunia Dursley), Daniel Rigby (Vernon Dursley), Anton Lesser (Ollivander) y Bertie Carvel (Cornelius Fudge). Un casting que mezcla veteranía, talento teatral británico y caras muy reconocibles para los espectadores más adultos.
Ocho episodios para el comienzo de todo
Aunque inicialmente se habló de seis episodios para adaptar cada libro de Harry Potter, la información más reciente apunta a que las dos primeras temporadas tendrán ocho episodios cada una. Esto da más margen para profundizar en momentos clave del universo mágico que antes solo se mencionaban de pasada, o que directamente se omitieron.
Más allá del metraje, la promesa de una adaptación más completa —y más fiel— empieza a tomar forma con cada nuevo dato que conocemos.
¿Qué se cuenta en el primer libro de Harry Potter?
La historia arranca con Harry viviendo en la casa de sus insoportables tíos, los Dursley. El chico no sabe nada sobre su origen ni sobre el mundo mágico. Pero todo cambia el día que recibe una carta que cambiará su destino para siempre: ha sido aceptado en el Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería.
Allí conocerá a Ron y Hermione, descubrirá secretos oscuros sobre sus padres, se enfrentará a trolls, acertijos y profesores enigmáticos, y se topará con un misterio que lo llevará a enfrentarse cara a cara con el mismísimo Voldemort… o lo que queda de él. Harry Potter y la piedra filosofal no es solo el inicio de una saga: es una puerta de entrada a un universo que ha marcado a varias generaciones.
El reto de reiniciar un icono
Convertir una saga tan querida en una serie no es tarea fácil. Hay demasiados ojos mirando, demasiadas comparaciones inevitables y demasiada presión por hacer las cosas bien. Pero lo que estas primeras imágenes demuestran es que el equipo creativo ha entendido lo que hace especial al mundo de Harry Potter: no los efectos, no las frases icónicas… sino el tiempo, el contexto, la inocencia de un niño que descubre la magia cuando la magia aún no tiene Wi-Fi.
Un Hogwarts que suena a Walkman
La ambientación en los 90 no solo tiene sentido narrativo, también es una decisión que añade textura al relato. Volveremos a ver un Hogwarts sin pantallas, sin redes sociales y sin apps. Solo magia, pergaminos, lechuzas y pasillos que crujen.
Eso no solo respeta el canon: lo potencia.
¿Y ahora qué?
Con las cámaras rodando y el reparto confirmado, la serie de Harry Potter empieza a coger forma real. Aún queda mucho por descubrir, pero este primer vistazo ha logrado lo que muchos consideraban imposible: generar ilusión sin traicionar la esencia.
Y si los trajes son solo el principio… ¿Qué otras sorpresas estarán por llegar?
