No es solo una fusión. Es un posible terremoto en la industria del cine. Dos gigantes que han producido algunas de las franquicias más taquilleras de las últimas décadas están a punto de unir fuerzas. Y si todo sale como se está negociando Legendary Pictures, las reglas del juego podrían cambiar.
Una compañía famosa por monstruos gigantes y otra por asesinos de traje negro, adolescentes rebeldes y juegos mortales están negociando lo impensable. El resultado puede ser un nuevo titán del entretenimiento con más de 20.000 títulos bajo el brazo y el poder de revivir un tipo de cine que parecía en peligro de extinción.
El trato de Legendary Pictures que está haciendo temblar a medio Hollywood
Según Bloomberg y medios especializados en la industria, Legendary Pictures está en conversaciones avanzadas para adquirir Lionsgate. No hablamos de rumores locos ni de movimientos menores: la operación es seria y ya ha tenido su primer efecto. Tras la noticia, las acciones de Lionsgate subieron más de un 20% al cierre del viernes.
Lionsgate logo
Legendary Pictures, el estudio que ha coproducido éxitos como Dune, Pacific Rim o el MonsterVerse de Godzilla y Kong, quiere dejar de ser «el socio fuerte en la sombra» para convertirse en un jugador principal. Y para ello, no hay mejor movimiento que hacerse con el control de un estudio que ha sabido conectar con el público como pocos: Lionsgate, responsables de sagas como John Wick, Los juegos del hambre, Saw o Crepúsculo.
Un matrimonio de conveniencia… muy rentable
Los analistas coinciden: esta posible unión tiene sentido estratégico total. Legendary Pictures aporta músculo financiero, experiencia en megaproducciones y una forma de operar basada en alianzas con grandes estudios. Lionsgate, por su parte, aporta algo que hoy vale oro: un catálogo brutal y una maquinaria de marketing que ha sabido colocar franquicias medianas en el mapa global.
De hecho, el primer paso no sería una compra directa, sino una colaboración en varias películas como co-financiadores. Si la química funciona, el paso siguiente sería la fusión definitiva.
Y es que, aunque muchos identifican a Lionsgate con sus franquicias millonarias, la compañía lleva un tiempo preparándose para un cambio grande. Tras separarse de Starz, su división de televisión, está libre para fusionarse o ser absorbida. Y este podría ser su momento.
Más allá de Wick y Katniss: lo que Legendary Pictures puede ganar
John Wick
El catálogo de Lionsgate no solo incluye a John Wick disparando en traje o a Katniss disparando flechas. Es una mina de oro de propiedades intelectuales que pueden relanzarse o expandirse en formatos nuevos. Estamos hablando de:
- Los Juegos del Hambre
- Crepúsculo
- La La Land
- Yellowjackets, la exitosa serie de Showtime
- Los Mercenarios
- Proyectos con potencial de franquicia como el universo de Monopoly (sí, el juego de mesa)
Pero no todo es tan fácil como parece.
El gran obstáculo: los derechos internacionales.
Uno de los mayores problemas que arrastra Lionsgate es que vendió los derechos internacionales de sus franquicias más potentes para sobrevivir a momentos financieros difíciles. Y lo hizo a largo plazo. Esto significa que, aunque Legendary Pictures adquiera la empresa, no podrá explotar mundialmente muchas de esas propiedades durante años.
Y en un mundo donde los blockbusters viven (y ganan) gracias al mercado internacional, eso es un freno importante.
Aun así, los analistas creen que el movimiento sigue teniendo lógica, porque la unión permitiría combinar recursos, creatividad, estrategia financiera y una lista de IPs con potencial de sobra para volver a enamorar a la audiencia.
Una alianza que podría cambiar las reglas del cine
En los últimos años, el cine de presupuesto medio ha sido el gran desaparecido. Hollywood ha apostado por blockbusters descomunales o por películas muy pequeñas que sobreviven en plataformas. Esta posible fusión podría devolver el equilibrio. Porque la unión de Legendary Pictures y Lionsgate no solo permitiría nuevos grandes proyectos, sino recuperar un cine más comercial, pero sin necesidad de costar 200 millones por producción.
¿Te imaginas un crossover entre John Wick y el universo de Godzilla? ¿O una comedia negra con monstruos gigantes y vampiros adolescentes? Vale, eso puede que no ocurra… o sí. Pero lo cierto es que la posibilidad de unir dos formas de hacer cine tan diferentes como las de Legendary Pictures y Lionsgate abre puertas muy interesantes.
¿Qué viene ahora?
Por ahora, ambas compañías están tanteando el terreno. Si la colaboración inicial va bien, veremos cómo evoluciona todo hacia una compra formal. Pero lo más interesante es que ya están sentando las bases de una nueva etapa para Hollywood, una en la que los estudios medianos, bien organizados, pueden volver a tener protagonismo frente a los gigantes tipo Disney, Warner o Netflix.
Y no olvidemos algo: Lionsgate siempre fue la parte que compraba. Durante años absorbió a compañías como Trimark Pictures (2000), Artisan Entertainment (2003) y más recientemente eOne (2023). Esta vez, el guion se invierte. Y eso, para una industria tan conservadora como la del cine, es un cambio de paradigma total.




