La saga de terror más retorcida de Hollywood ha vuelto con más fuerza que nunca. Destino final: Lazos de sangre (Final Destination: Bloodlines), la sexta entrega de esta popular franquicia, ha hecho su debut en los cines con una recaudación impresionante de 51 millones de dólares en su primer fin de semana en Estados Unidos, sumando 102 millones de dólares en todo el mundo.
Un retorno triunfal para la saga de terror que ha sacudido la taquilla y dejado atrás a gigantes como Thunderbolts de Marvel y la nueva apuesta de The Weeknd, Hurry Up Tomorrow.
Una apertura sangrienta
Con un presupuesto de aproximadamente 50 millones de dólares, Destino final: Lazos de sangre ha logrado superar todas las expectativas, duplicando el récord de apertura de la franquicia, que estaba en manos de El destino final (The Final Destination) de 2009 con 27 millones de dólares. Tras 14 años de ausencia, el público ha respondido con entusiasmo, elevando su recaudación global a 102 millones de dólares gracias a los ingresos de 74 mercados internacionales.
Una cifra impresionante que demuestra que el terror sigue siendo uno de los géneros más rentables. Ya que el presupuesto no lo es todo, es más importante hacer una historia que atraiga a los espectadores.
Destino final: Lazos de sangre
La fórmula del éxito
¿Por qué ha funcionado tan bien esta nueva entrega? Parte del mérito se debe a las críticas positivas que ha recibido Destino final: Lazos de sangre, con una puntuación del 93% en Rotten Tomatoes, algo raro para una película de terror. Además, los espectadores le otorgaron una calificación de «B+» en las encuestas de CinemaScore, un indicativo de que la cinta ha logrado conectar con su público objetivo.
El secreto detrás de este éxito radica en su trama. Ya que Destino final: Lazos de sangre se centra en una familia que comienza a morir uno a uno debido a que la matriarca sobrevivió a un evento mortal hace 50 años, alterando el destino que debía haber seguido. Esta premisa no solo es terrorífica, sino que juega con el miedo humano más profundo: la inevitabilidad del destino y las consecuencias de desafiarlo.
El terror sigue reinando
El dominio de Destino final: Lazos de sangre en la taquilla es un reflejo de cómo el género de terror ha evolucionado en los últimos años. Películas como M3GAN y Smile han demostrado que el público tiene un apetito insaciable por el horror cuando está bien ejecutado. Esta tendencia es especialmente fuerte en el mercado post-pandemia, donde las experiencias intensas y emocionales parecen atraer a más espectadores que nunca.
Además, Destino final: Lazos de sangre se beneficia de un legado nostálgico que atrae tanto a nuevos espectadores como a los fanáticos de siempre. Para Warner Bros., este éxito representa un respiro después de una serie de fracasos comerciales recientes como Mickey 17 y Joker: Folie à Deux. Parece que el estudio tendrá un gran 2025.
La competencia en la taquilla
El fin de semana también vio a Thunderbolts de Marvel caer al segundo lugar con 16,5 millones de dólares, una caída del 50% respecto a su fin de semana anterior. Aunque la película ha recaudado 155,4 millones a nivel nacional y 325 millones a nivel global, parece que le costará alcanzar la rentabilidad dada su producción de 180 millones de dólares y otros 100 millones en marketing.
Mientras tanto, Hurry Up Tomorrow, el thriller existencial de The Weeknd y Jenna Ortega, se estrelló en la sexta posición con solo 3,3 millones de dólares en 2.020 salas, un resultado decepcionante que refleja tanto las malas críticas (14% en Rotten Tomatoes) como una calificación de «C-» en CinemaScore.
Hurry Up Tomorrow con Jenna Ortega
El regreso de los éxitos de Warner Bros.
Warner Bros. ha tenido un impresionante regreso a la cima con tres películas en el top 5: Destino final: Lazos de sangre, Sinners (Los Pecadores) y Una película de Minecraft. Esta última, ha acumulado 928 millones de dólares a nivel mundial, convirtiéndose en uno de los mayores éxitos del estudio en años recientes.
El futuro del terror
Con este éxito, es muy probable que veamos más entregas de la saga Final Destination en los próximos años. El público ha dejado claro que sigue disfrutando del terror que desafía las reglas del destino, y mientras las historias sigan siendo creativas y aterradoras, el éxito de taquilla parece asegurado.
La industria del cine siempre busca la próxima gran franquicia, y si algo nos ha enseñado Destino final: Lazos de sangre, es que el terror, cuando se hace bien, puede ser tan rentable como cualquier superproducción de acción o ciencia ficción.
El próximo fin de semana habrá una batalla tremenda por el puesto número uno, ya que se estrena Lilo y Stitch junto a Misión Imposible: Sentencia Final. Será interesante descubrir los números de ambas películas.




