La temporada 2 de High Potential acaba de subir la apuesta, y no precisamente por el caso de la semana. Los fans del procedural protagonizado por Kaitlin Olson ya lo sospechaban: algo muy turbio se esconde tras el nuevo jefe de la unidad, el Capitán Wagner (Steve Howey). Y con el “Game Maker” fuera de escena, parece que la serie ya tiene a su reemplazo… y quizás al responsable de la desaparición más importante de toda la trama.
Un caso sin cerrar: el fantasma de Roman Sinquerra
Desde el primer episodio, la desaparición del ex de Morgan, Roman Sinquerra, ha sido el gran misterio que sobrevuela toda la serie. Quince años atrás, el hombre desapareció sin dejar rastro, dejando a Morgan y a su hija Ava completamente solas. En la temporada anterior descubrimos que Roman era un informante del FBI y que alguien dentro de las fuerzas de seguridad lo obligó a esconderse.
Ahora, en la segunda temporada, la historia vuelve a cobrar fuerza: Morgan acaba de recibir la mochila de Roman, entregada por Arthur (Mekhi Phifer). Ese pequeño detalle parece el primer hilo del ovillo que podría conducir hasta la verdad. Pero, como todo buen thriller de televisión, quizá el enemigo esté más cerca de lo que imaginamos.
El nuevo capitán que huele a problema
Wagner fue presentado en el episodio anterior como el nuevo capitán de policía que llega para sustituir a Selena (Judy Reyes). De primeras parecía un tipo encantador, ambicioso y un tanto arrogante, el clásico superior jerárquico que promete “traer orden al caos”. Pero en el capítulo “Content Warning” hemos visto su verdadera cara: nepotismo, manipulación y una obsesión preocupante con Morgan.
Proviene de una familia poderosa dentro de la policía y está decidido a brillar, aunque tenga que pisar a otros para lograrlo. No solo ha arrebatado el ascenso que merecía Selena, sino que además intenta presionar a Daphne (Javicia Leslie) para que abandone su puesto en Crímenes Mayores.
Lo más inquietante es su fijación con Morgan: dedica demasiado tiempo a observarla, a hablar de ella, incluso a interferir en los interrogatorios de su compañero Karadec (Daniel Sunjata) para obtener información personal. Si algo nos ha enseñado la televisión policial, es que nadie tan amable, guapo y entrometido es de fiar.

¿Y si Wagner fuera el verdadero culpable?
El guion parece ir dejando migas de pan hacia esa posibilidad.
Recordemos que Roman desapareció por culpa de alguien
dentro de las fuerzas del orden, un traidor que lo obligó
a huir tras la muerte de su contacto en el FBI.
La línea temporal encaja: el padre de Wagner se retiró
cinco años después de la desaparición de Roman, y ahora el
propio Wagner llega con un currículum tan impecable que resulta
sospechoso.
Sería el giro perfecto para una serie que adora jugar con las dobles caras. Que el nuevo superior de Morgan —y posible interés romántico— sea en realidad el hombre responsable de haber destruido su vida quince años atrás no solo encajaría con el tono del show, sino que serviría como herida emocional para explotar toda la temporada.
High Potential sigue la tradición de los falsos aliados
Las series procedimentales adoran este tipo de tramas: el lobo con placa. 9-1-1 lo hizo con Jonah Greenway, The Rookie con Nick Armstrong, y ahora High Potential parece seguir el mismo camino con Wagner.
El personaje cumple todos los requisitos: llega como nuevo aliado, se gana la confianza de todos y, cuando por fin parece redimido, se revela como el villano interno que movía los hilos desde el principio.
Y en este caso, la jugada sería doblemente efectiva: Wagner no solo podría ser el sustituto del Game Maker, sino el cerebro que obligó a Roman a desaparecer. Una mezcla entre enemigo íntimo y fantasma del pasado que pondría a Morgan ante su mayor dilema: ¿Qué hacer cuando la persona que más te atrae podría ser quien destruyó tu vida?
Morgan Gillory: detective, madre… y ahora cazadora de su propio pasado
Morgan siempre ha destacado en High Potential por su mente brillante, su sarcasmo y esa mezcla de caos y genialidad que la convierte en una de las protagonistas más carismáticas de la televisión actual.
Ahora, con la mochila de Roman en sus manos y Wagner cada vez más cerca, la serie tiene todos los ingredientes para explotar su conflicto emocional: una mujer que resuelve los secretos de otros, pero que lleva quince años sin resolver el suyo.
Lo que viene: una temporada más oscura y personal

El show parece encaminado hacia un tono más conspirativo, donde las conexiones entre el FBI, la policía y los informantes revelarán una red mucho más grande de lo esperado.
Si Wagner resulta ser el villano, High Potential podría firmar su mejor arco narrativo hasta la fecha: un duelo entre la intuición de Morgan y el poder institucional que lleva años ocultando la verdad.
Y conociendo la energía sarcástica y emocional que Kaitlin Olson imprime al papel, no sería extraño que esta historia se convierta en el nuevo gran gancho de la serie.
El misterio de Roman Sinquerra está a punto de resucitar, y el nuevo capitán parece tener más sombras que su despacho. High Potential demuestra que aún puede reinventar el procedural clásico con humor, intriga y personajes llenos de cicatrices.
¿Será Wagner el verdadero villano o solo otro peón en el tablero? Sea cual sea la respuesta, Morgan Gillory está más cerca que nunca de encontrar la verdad… y de perderlo todo en el intento. Puedes ver la serie en Disney +, Star + y Hulu.




