Tras los volúmenes anteriores de La imposible Patrulla-X que contuvieron La Masacre Mutante y La Caída de los Mutantes. Ahora es el turno de Inferno, el tercer gran crossover de los mutis en Marvel. Panini Comics agrupa en un solo volumen toda la saga que reunió a todos los grupos de la franquicia.
La conveniencia de esta publicación en Marvel
Está claro que La Imposible Patrulla-X es la serie sobre la que fueron naciendo todas las demás. Y no está mal que sea dentro de su reedición en Marvel Gold donde vayamos encontrando todos sus números, sin excepción. Pero nos encontramos ante un evento tan especial, y sus consecuencias. Solo cinco episodios son de su cabecera, el resto se reparte entre la participación de Los Nuevos Mutantes (con tres), Factor-X (con la friolera de ocho) y una serie limitada protagonizada por los que se van a autodenominar como X-Terminadores, los jóvenes vinculados a Factor-X (con cuatro). El protagonismo inclina la balanza más hacia el lado de Scott Summers y el resto de integrantes de La Patrulla-X Original.
Pero a pesar de su inclusión en La Patrulla-X. La edición del resto de Marvel Golds de Nuevos Mutantes y Factor-X enlaza directamente con este macro evento. Por lo que Inferno encaja a la perfección hagas la colección que hagas y su relevancia hace que poder tener su lectura condensada en un solo tomo lo convierta en una delicia a disfrutar. La forma en la que se van sucediendo los diferentes momentos, enlazando unos con otros en diferentes colecciones e incluso solapándose a lo largo de la trama, dice mucho de la labor editorial que hubo detrás de semejante obra, aunque el mayor peso recayese sobre la guionista Louise Simonson.
El foco múltiple de atención
Inferno se caracterizó por generar un entorno común. Una Manhattan inundada de demonios, para contar y dejar cerradas diversas tramas, que llevaban un tiempo abiertas en sus respectivas colecciones. Por parte de Los Nuevos Mutantes se arrastraba la historia de Illyana y su aceptación de su condición como Niña Oscura del Limbo. Factor-X en conjunción con La Patrulla-X tenía el caso de Madelyne Pryor, junto al papel de Mr. Siniestro en todo ello y la participación de Los Merodeadores, a los que se la tenían jurada desde los sucesos de la Masacre Mutante.
Esta saga de Marvel cerró una larga etapa y sirvió para que se produjera un encuentro que llevaba mucho tiempo demorándose, el de los dos grupos principales entre los mutantes. Los miembros originales no habían tenido la oportunidad de reencontrarse aun con los que surgieron de la Segunda Génesis y los que se habían ido añadiendo con el paso del tiempo. Inferno ofreció el momento cumbre para ello, algo que por motivos editoriales o por falta de oportunidad no había sucedido antes. No fue algo dulce pero al final sirvió para aclarar desde malentendidos sobre las actividades de unos a desatascar la creencia en el fallecimiento de los otros.
La sincronización de Chris y Louise
No cabe duda que una saga de estas proporciones tiene entre sus culpables principales a los guionistas de todas esas cabeceras, predominando Louise Simonson, que se ocupaba de Los Nuevos Mutantes, de Factor-X y realizó también X-Terminadores, con Chris Claremont manteniéndose solamente en La Imposible Patrulla-X. El buen entendimiento entre ambos venía de la época en que Louise (entonces Jones) había sido editora suya, algo que se refleja a cada paso que vamos viendo. Pero lejos de limitarse a cerrar argumentos, también surgieron nuevos personajes en aquellas páginas.
Hablamos de Nanny y su Creahuérfanos o de Takeshi Matsuya (Genio), cuyos primeros minutos de gloria tuvieron lugar durante la apertura y el cierre de la saga. Creatividad que surgía de Louise Simonson, al tiempo que dotaba de empaque a los villanos encabezados por la Reina Duende, S'ym o N'astirh, cada uno interesado en hacerse con un poder y un gobierno que les llevará incluso a rivalizar. Inferno forma parte del imaginario de todos los fans de los mutantes e incluso se ha reutilizado el término recientemente para nombrar el final de la colaboración de Jonathan Hickman en las cabeceras actuales. Pero lo que está claro es que la saga original es un must have que debe estar en tu estantería, por contar además con el esplendido dibujo de Marc Silvestri, Walter Simonson, John Bogdanove y Bret Blevins que terminan de dar el toque perfecto a la narración.