Knull, el dios de los simbiontes es una peligrosa amenaza para todo el Universo Marvel, por suerte hay alguien que puede derrotarlo.
Atención SPOILERS del cómic de Marvel Venom número 23 de Donny Cates, Mark Bagley, Andy Owens, Frank Martin y Clayton Cowles. En «Venom Island», Eddie Brock se ha recluido en una isla desierta para cazar al simbionte Carnage, que se ha apoderado con éxito del simbionte Venom. Armado con bombas, armas y fuego, Eddie se transformó en un cazador para deshacerse de su viejo enemigo de una vez por todas. Desafortunadamente para él, las cosas tomaron un giro sorprendente cuando, Eddie tuvo que cortarse su propia mano para escapar de Carnage.
Ahora, en Venom número 23, Eddie Brock todavía se está recuperando de su herida autoinfligida, y Carnage está casi victorioso. Mientras lucha por mantenerse consciente, Eddie hace un intento desesperado escalando una montaña para alcanzar una antena de metal en la parte superior. Su plan solo se aclara cuando revela el nombre del dios al que reza pidiendo ayuda: el nombre del único héroe que puede derrotar a los simbiontes y su dios oscuro de los simbiontes: «El poderoso THOR«.
Eddie Brock diseña plan final para separar a Carnage del simbionte de Venom en medio de una tormenta.
A medida que llueve y truena a su alrededor, Carnage y Eddie están efectivamente en una carrera por la montaña, y Carnage tiene como objetivo apoderarse de él permanentemente. Por un momento, parece que Carnage obtendrá lo que quiere cuando comience a envolver a Eddie. A solo unos segundos de convertirlo en su nuevo anfitrión, la mano libre de Eddie agarra la antena de metal justo cuando un rayo la golpea, probablemente gracias a la ayuda del Dios del Trueno de Marvel.
El choque es lo suficientemente poderoso como para expulsar a Carnage de Eddie y logra separar a Venom del simbionte malicioso.
En el cómic de Marvel Venom número 21, el simbionte le dijo que Thor fue quien fue capaz de vencer a Knull la primera vez. Cuando Knull estaba en la cima de su poder hace miles de años, tenía todo el Klyntar bajo su control, y su dragón Grendel estaba suelto en la Tierra. Cuando un joven Thor luchó contra este monstruo simbionte, su rayo cortó la conexión que Knull tenía sobre sus simbiontes. Ahora libre de su control, los Klyntar se volvieron contra su creador y lo atraparon en un planeta creado por ellos mismos.
