Hay palabras que se ponen de moda y entonces las empieza a usar todo el mundo, se abusa de ellas y sencillamente se cae en la locura. Me viene a la cabeza esa gente que ahora está usando el término selfie como sosias de retrato (sea uno mismo el que lo haga u otro), o la cantidad de artículos que se ven sobre los millenials al igual que hace años tocó el turno a los hipsters o a la música indie.
Hace tiempo, ya unos pocos años, llegó el spoiler. Y sí, de nuevo la locura. De pronto todo el mundo vivía atormentado por si alguien desvelaba una parte de una película o de una serie, una parte importante; después fue a más y prácticamente todo era un spoiler.
Daba igual si era relevante o no, si la productora ya lo había dicho o no, si llevaba meses o años en el mercado o no. Lo dicho de locos.
Y hay otra consecuencia, el no tener libertad para hablar de aquello que te gusta.
Sí, claro que hay que respetar a todo el que no ha podido ver o leer tal o cual cosa, al menos por un tiempo, pero es igual de justo entender y respetar que las personas quieran hablar de algo que les ha gusto, o que quieran poner a parir lo que les ha decepcionado.
Por ejemplo, Han Solo muere en El despertar de la Fuerza. Si alguien no lo sabía, no diré lo siento, se estrenó en diciembre de 2015, tiempo más que de sobra. Puedo llevarlo más allá, he escuchado decir que no se debería decir que Darth Vader es el padre de Luke, que es uno de los hechos más conocidos del cine, pero podría considerarse spoiler.
Peor, hasta he llegado a ver en algún grupo de Facebook que decir que Romeo y Julieta mueren es spoiler.
¿Estamos tontos o qué?
¡Hasta una vez flipé con alguien quejándose por decir quiénes se enfrentaban en Capitán América: Civil War! ¡¡¡PERO SI SALE EN EL CARTEL!!!
Y suma y sigue.
Sí, es una faena que alguien nos desvele una parte importante (importante, importante no es cualquiera, importante es importante) pero una producción audiovisual es mucho más. No es solo un giro en la trama o la sorpresa al final del episodio, es las actuaciones, la fotografía, el ritmo, la música y otros tantos puntos que parece que la gente no aprecia en absoluto.
No hay reflexión, solo una idea: no os preocupéis por el spoiler y disfrutad.