Mark Millar regresa a Jupiter’s Legacy, una de sus creaciones más populares. ¡La familia de superhéroes más poderosa y disfuncional del cómic regresa por todo lo alto!
El mundo cambió cuando llegaron los superhéroes, y volvió a cambiar cuando tomaron el control. Ahora la Tierra vive una edad dorada gracias a los superhéroes. Parece que el mundo gira alrededor de aquellos que se autodeclaran salvadores y asemejan dioses para los hombres normales y eso no es natural. Ninguna religión es capaz de aguantar el choque con el ego de la humanidad, o de la superhumanidad. Mark Millar retoma Jupiter’s Legacy con una idea en mente, destruir todo lo construido.
La familia Sampson es nuevamente el centro de todo, por tercera vez. El mundo sigue girando y nuevos supers aparecen. Siguen siendo egoístas y estúpidos, pero hay un Nuevo Utopian, una nueva Lady Liberty para detenerlos y para guiar al mundo. De las semillas de una conquista había nacido una sociedad donde los supers ayudaban, aportan, lejos de la idea del primer Utopian de no cambiar la historia Y esto puede ser un desastre tan grande como cuando Brandon tomó el control de los Estados Unidos. Mientras Skyfox ha vuelto a su vida de mierda, cambiar no es lo suyo, pero arreglar los líos de los Sampson si, por algo sin familia.
De nuevo la familia tiene el destino del mundo en sus manos. Y no lo hacen bien, de nuevo. Los viejos personajes regresan. Han cambiado, evolucionado, los hijos toman los papeles de los padres y el escenario tiene una serie de precedentes que no quieren repetir. Pero siempre hay espacio para los nuevos errores.
Hacía tiempo que Mark Millar no se esforzaba en una serie. Crear muchas series y de vez en cuando escribir un arco para seguirlas parecía suficiente para el británico. Continuar una de sus sagas más populares exige mucho más esfuerzo, necesitaba una buena idea, novedades y desarrollos que hicieran interesante la nueva saga, y lo consigue. Jupiter’s Legacy Requiem es un cierre (por el momento) y va a llevar a los personajes a enfrentarse a los errores de sus padres, a sus errores y a la importancia de sus decisiones.
Nuevamente ser un ser superpoderosos supone mucho más allá de llevar el traje y hacer el bien, tras los incidentes de la primera serie hay muchas cuestiones que Millar responde rápidamente para poder contar lo que está por llegar. Estas nuevas tramas son diferentes de las que se enfrentaron en las dos series anteriores. Si la original planteaba la duda de lo que podría ser un mundo con supers y la segunda rascaba más en el origen pulp de los poderes, esta tercera profundiza en una vía diferente, el uso de esos poderes en pro de la sociedad produce evolución, o la fuerza obteniendo un cambio para el que no estamos preparados.
En esta ocasión cuenta con un dibujante espectacular como Tommy Lee Edwards, que se coloca en las antípodas de lo que era Frank Quitely. Con contrastes potentes los negros de Edwards caracterizan un mundo que ha cambiado y no es solo de supers, sino de una humanidad que se encuentra en una transición difícil. Detallado y con un atención en los rostros, el estilo de Lee Edwards siempre ha sido perfecto para narrar historias de personas, en esta ocasión se esfuerza, como ya hiciera en Marvel 1985 también con Millar, para que los supers sean mucho más impactantes, dioses entre hombres.
Estamos de suerte cuando el Millarworld aumenta, pero tenemos aún más cuando el creador de todas estas historias decide expandir en lugar de iniciar universos. Mark Millar tiene nuevos proyectos cada año y no suele regresar a viejas obras, pero cuando lo hace no siempre es para bien. No es el caso, y Jupiter’s Legacy. Requiem es una buena continuación de la conocida saga.