Analizamos el 5×01 de ‘Arrow’ (titulado «Legacy»), el primero de la quinta temporada que sirve para contextualizar el regreso del Arquero Esmeralda a la pequeña pantalla.
Si el otro día le tocó el turno a The Flash, hoy le ha tocado el turno a Arrow. La serie primitiva de CW, la que inició todo, regresa con su quinta entrega. Cinco años en los que hemos vivido demasiados acontecimientos junto a Oliver Queen (Stephen Amell). Se ha enamorado varias veces. Ha perdido amigos, familiares, personas queridas. Su forma de ser ha variado. Es un vigilante diferente del que era al principio. Incluso su atuendo ha sufrido modificaciones. Pero, en definitiva, es Arrow. Sigue siéndolo. Y ahora, una vez más, debe hacer frente a problemas personales muy intensos.
El primer capítulo de la quinta temporada es únicamente contextualizador
La quinta temporada de Arrow comienza con Legacy. Este capítulo 5×01 es más contextualizador que otra cosa. Todavía no hay un villano definido, como suele ser habitual. Oliver debe hacer frente a lo que sucedió al final de la entrega anterior y superar la muerte de Laurel Lance (Black Canary). Además de ello, su dualidad como justiciero y persona se ve desbordada porque ahora es el alcalde de Star City. Y la corrupción de la policía local de la ciudad, así como el abandono del capitán Quentin Lance del cuerpo, le han dejado prácticamente solo.
Thea, su hermana, también ha tirado la toalla. Y John Diggle, su mejor amigo, se ha visto obligado a dejar la ciudad. Solo Felicity Smoak, en condición de Overwatch, permanece al lado de Oliver. Pero como activo en la guerra del Arquero Esmeralda, porque ya no mantienen una relación amorosa. Para desgracia del numeroso Team Olicity que gobierna las redes sociales.
Oliver Queen ha vuelto a ser el personaje maniqueo de sus orígenes televisivos
Con este contexto empezamos el quinto año consecutivo de Arrow, que vuelve a mantener el formato clásico de mezclar trama principal con flashbacks para seguir narrando las andanzas de Oliver Queen antes de su regreso a la, por entonces, denominada Starling City. ¿Será capaz Oliver de plantar cara a las amenazas venideras sin su equipo? ¿Formará un nuevo bloque para defender a los ciudadanos? ¿O dejará definitivamente atrás el arco y la capa para centrarse en sus labores políticas? Una temporada por delante, junto a los crossover con los otros superhéroes, para descubrir el nuevo devenir de un justiciero que ha vuelto a los andadas: a matar. A ser el oscuro personaje del principio de la serie. Al pensamiento maniquero de sus orígenes televisivos.
